La razón es simple. Los semáforos copiaron el código de colores del sistema ferroviario, que además cuentan con un espectro de visibilidad alto y pueden reconocerse con facilidad desde largas distancias. Por lo tanto, el color rojo significa parar, un color brillante que en nuestra naturaleza asociamos con el peligro.
Respuesta:
La razón es simple. Los semáforos copiaron el código de colores del sistema ferroviario, que además cuentan con un espectro de visibilidad alto y pueden reconocerse con facilidad desde largas distancias. Por lo tanto, el color rojo significa parar, un color brillante que en nuestra naturaleza asociamos con el peligro.
Explicación: