Por ello, el entrenamiento de fuerza podría ser el tipo de ejercicio clínicamente más apropiado para estos pacientes. El gasto calórico con este tipo de entrenamiento es menor que con el ejercicio aeróbico y, además, su efecto podría ser doblemente positivo, ya que favorece la mejora de la densidad mineral ósea.
Respuesta:
Hola!!
Por ello, el entrenamiento de fuerza podría ser el tipo de ejercicio clínicamente más apropiado para estos pacientes. El gasto calórico con este tipo de entrenamiento es menor que con el ejercicio aeróbico y, además, su efecto podría ser doblemente positivo, ya que favorece la mejora de la densidad mineral ósea.
Explicación:
Espero te ayude!!! ^_^