Los caracteres transmisibles hereditariamente de padres a hijos son los que motivan la semejanza morfológica y funcional que existe entre ascendientes y descendientes.
Estos caracteres hereditarios pertenecen a tres categorías: hay caracteres específicos o peculiares de la especie; caracteres infraespecíficos, raciales o individuales; y caracteres nuevos o aparecidos súbitamente en un individuo a causa de una mutación.
Este conjunto de caracteres transmisibles a la descendencia es lo que constituye la herencia biológica, de cuyo estudio se ocupa la Genética, parte de la Biología que investiga los fenómenos hereditarios y las leyes que los regulan.
Los caracteres transmisibles hereditariamente de padres a hijos son los que motivan la semejanza morfológica y funcional que existe entre ascendientes y descendientes.
Estos caracteres hereditarios pertenecen a tres categorías: hay caracteres específicos o peculiares de la especie; caracteres infraespecíficos, raciales o individuales; y caracteres nuevos o aparecidos súbitamente en un individuo a causa de una mutación.
Este conjunto de caracteres transmisibles a la descendencia es lo que constituye la herencia biológica, de cuyo estudio se ocupa la Genética, parte de la Biología que investiga los fenómenos hereditarios y las leyes que los regulan.