¡Notificar abuso!Eras casi una niña desposada, Y tu mente inocente no se explica, Que un ángel ante ti casi suplica, Que aceptes la misión a ti confiada.
Obra en ti el corazón, que no la mente Que da su asentimiento al ángel santo, Y diciendo que sí, ya mientras tanto Te das con entusiasmo adolescente.
No das más tregua al fruto de la ciencia, Que sabes entregarte a la misión Con gran sabiduría y decisión, Embargada por Dios y tu conciencia.
Y tu mente inocente no se explica,
Que un ángel ante ti casi suplica,
Que aceptes la misión a ti confiada.
Obra en ti el corazón, que no la mente
Que da su asentimiento al ángel santo,
Y diciendo que sí, ya mientras tanto
Te das con entusiasmo adolescente.
No das más tregua al fruto de la ciencia,
Que sabes entregarte a la misión
Con gran sabiduría y decisión,
Embargada por Dios y tu conciencia.