Antes de empezar a escribir debemos reflexionar sobre qué queremos conseguir con nuestro informe. ¿Vamos a solicitar la solución a un problema o simplemente a almacenar datos para poder usarlos más adelante? ¿Queremos reflejar una investigación científica o presentar una queja? Hemos de tenerlo en cuenta para seleccionar el tipo de informe que sea más pertinente según el caso. 2. Ten en cuenta el tipo de texto que vas a emplear
No todos los informes son iguales, pudiendo presentar cada uno sus propias características distintivas. Por ejemplo, un informe expositivo va a reflejar datos sin realizar ningún tipo de interpretación respecto a ellos, no existiendo la posibilidad de hacer conclusiones, mientras uno de tipo demostrativo va a requerir que el sujeto elabore hipótesis y las ponga a prueba de manera que obtenga una serie de resultados y conclusiones. 3. Contempla el target
No solo importa el para qué o el cómo, sino que se debe pensar en que público tiene nuestro informe como objetivo. Ello nos permitirá adecuar el nivel de lenguaje tanto a nuestras necesidades como a las de dicho público.
4. Selección y análisis de la info
En función del paso anterior es fundamental reunir la información que queremos proporcionar y estructurarla adecuadamente de manera que nuestro discurso tenga un hilo conductor. También se debe tener en cuenta el tipo de datos a reflejar y quién o cómo se ha extraído la información. 5. Podemos usar elementos gráficos
Aunque depende del tipo de informe, es posible utilizar elementos visuales que faciliten la comprensión de los datos. Nos estamos refiriendo por ejemplo al uso de gráficos de barras para analizar frecuencias o bien para realizar un análisis de ganancias y costes. 6. Título
Si bien puede parecer una tontería mencionarlo, titular correctamente el informe de una forma clara, relativa al tema que conlleva su realización y fácilmente comprensible es algo que facilita mucho su comprensión por parte de los lectores.
7. Redacta la introducción
En este primer apartado del informe en cuestión realizaremos un breve resumen del tema a tratar en el informe. En él debe aparecer el objetivo de la realización de dicho informe y el problema que genera la necesidad de su existencia y el contexto en el que se lleva a cabo. 8. Expande las ideas y explica lo investigado en el desarrollo
En el cuerpo del informe dispondremos y expandiremos la información sobre el sucedido o investigado, dejando claros los métodos y acciones que muestran cómo se produjo o se desempeñó la situación y la manera de obtener los datos. Si se trata de un informe que refleja una investigación se incorporarán aspectos como modelos teóricos y exploración de la situación. 9. Elabora una conclusión
En la última parte del informe se debe reflejar el resultado final de lo explorado y reflejado en el informe o la demanda o petición que se hace de cara a resolver la situación. Debe ser clara y entendible. 10. Lenguaje a emplear
Es fundamental que en todo el redactado el lenguaje sea claro y conciso. Ha de ser redactado de manera formal y objetiva, en tercera persona y en voz pasiva. Se han de separar los hechos de las inferencias que se lleven a cabo (si es que las hay) y se tienen que ofrecer directamente los datos con los que se está tratando y explicar claramente por qué son relevantes.
Respuesta:
Tener la información posible sacada de fuentes de información para tener tu informe
Antes de empezar a escribir debemos reflexionar sobre qué queremos conseguir con nuestro informe. ¿Vamos a solicitar la solución a un problema o simplemente a almacenar datos para poder usarlos más adelante? ¿Queremos reflejar una investigación científica o presentar una queja? Hemos de tenerlo en cuenta para seleccionar el tipo de informe que sea más pertinente según el caso.
2. Ten en cuenta el tipo de texto que vas a emplear
No todos los informes son iguales, pudiendo presentar cada uno sus propias características distintivas. Por ejemplo, un informe expositivo va a reflejar datos sin realizar ningún tipo de interpretación respecto a ellos, no existiendo la posibilidad de hacer conclusiones, mientras uno de tipo demostrativo va a requerir que el sujeto elabore hipótesis y las ponga a prueba de manera que obtenga una serie de resultados y conclusiones.
3. Contempla el target
No solo importa el para qué o el cómo, sino que se debe pensar en que público tiene nuestro informe como objetivo. Ello nos permitirá adecuar el nivel de lenguaje tanto a nuestras necesidades como a las de dicho público.
4. Selección y análisis de la info
En función del paso anterior es fundamental reunir la información que queremos proporcionar y estructurarla adecuadamente de manera que nuestro discurso tenga un hilo conductor. También se debe tener en cuenta el tipo de datos a reflejar y quién o cómo se ha extraído la información.
5. Podemos usar elementos gráficos
Aunque depende del tipo de informe, es posible utilizar elementos visuales que faciliten la comprensión de los datos. Nos estamos refiriendo por ejemplo al uso de gráficos de barras para analizar frecuencias o bien para realizar un análisis de ganancias y costes.
6. Título
Si bien puede parecer una tontería mencionarlo, titular correctamente el informe de una forma clara, relativa al tema que conlleva su realización y fácilmente comprensible es algo que facilita mucho su comprensión por parte de los lectores.
7. Redacta la introducción
En este primer apartado del informe en cuestión realizaremos un breve resumen del tema a tratar en el informe. En él debe aparecer el objetivo de la realización de dicho informe y el problema que genera la necesidad de su existencia y el contexto en el que se lleva a cabo.
8. Expande las ideas y explica lo investigado en el desarrollo
En el cuerpo del informe dispondremos y expandiremos la información sobre el sucedido o investigado, dejando claros los métodos y acciones que muestran cómo se produjo o se desempeñó la situación y la manera de obtener los datos. Si se trata de un informe que refleja una investigación se incorporarán aspectos como modelos teóricos y exploración de la situación.
9. Elabora una conclusión
En la última parte del informe se debe reflejar el resultado final de lo explorado y reflejado en el informe o la demanda o petición que se hace de cara a resolver la situación. Debe ser clara y entendible.
10. Lenguaje a emplear
Es fundamental que en todo el redactado el lenguaje sea claro y conciso. Ha de ser redactado de manera formal y objetiva, en tercera persona y en voz pasiva. Se han de separar los hechos de las inferencias que se lleven a cabo (si es que las hay) y se tienen que ofrecer directamente los datos con los que se está tratando y explicar claramente por qué son relevantes.