Es una de las sustancias más codiciadas del planeta y se usa... ¡para hacer perfumes!
Se conoce en realidad como ámbar gris y es una secreción que produce el estómago de los cachalotes cuando tratan de ingerir alimentos demasiado duros. A veces esta secreción es expulsada en el mar y pasa varios días a la deriva, expuesta al sol y los elementos. Durante su viaje se transforma en una sustancia de olor dulzón y textura cerosa que es muy codiciada por los fabricantes de perfumes.
Aunque el olor puede ser muy fuerte en grandes cantidades, resulta un excelente fijador de aromas, de ahí su éxito entre las grandes casas de perfumería. Hace tiempo que los científicos consiguieron reproducir las cualidades del ámbar gris en el laboratorio y la mayoría de perfumes hoy en día utilizan este compuesto sintético, de más fácil obtención. Las fragancias más exclusivas, sin embargo, aún apuestan por la versión natural y su precio es muy elevado.
Es una de las sustancias más codiciadas del planeta y se usa... ¡para hacer perfumes!
Se conoce en realidad como ámbar gris y es una secreción que produce el estómago de los cachalotes cuando tratan de ingerir alimentos demasiado duros. A veces esta secreción es expulsada en el mar y pasa varios días a la deriva, expuesta al sol y los elementos. Durante su viaje se transforma en una sustancia de olor dulzón y textura cerosa que es muy codiciada por los fabricantes de perfumes.
Aunque el olor puede ser muy fuerte en grandes cantidades, resulta un excelente fijador de aromas, de ahí su éxito entre las grandes casas de perfumería. Hace tiempo que los científicos consiguieron reproducir las cualidades del ámbar gris en el laboratorio y la mayoría de perfumes hoy en día utilizan este compuesto sintético, de más fácil obtención. Las fragancias más exclusivas, sin embargo, aún apuestan por la versión natural y su precio es muy elevado.