alejanro05465
El joven cuyos ojos brillaban como zafiros, me miraba intensamente. La joven como una ágil gacela recorría el bosque. La voz del sargento, cual truenos en tormenta me despertó de mis sueños. La sangre brotaba de su pecho como la incandescente lava de un volcán.
La joven como una ágil gacela recorría el bosque.
La voz del sargento, cual truenos en tormenta me despertó de mis sueños.
La sangre brotaba de su pecho como la incandescente lava de un volcán.