Las playas costeras de recreación veraniega son zonas de esparcimiento muy concurridas en los meses de verano y las actividades acuáticas brindan enormes beneficios, importantes para la recreación, salud y bienestar de las personas. No sólo benefician a los lugareños, también atraen a numerosos turistas cuyos desembolsos favorecen a las economías locales. Sin embargo, el baño en el agua de mar puede representar riesgos para la salud de los usuarios, debido a que las aguas pueden estar contaminadas con excretas humanas; las cuales pueden contener agentes patógenos causantes de infección, enfermedad y muerte.
La contaminación de playas en América Latina y el Caribe, causadas por descargas sin control de desagües domésticos no tratados, constituye un problema serio de salud para la población; en algunos casos son problemas permanentes de algunas playas y en otros son consecuencia de circunstancias excepcionales como el colapso del sistema de tuberías de desagüe que contaminó las playas de Río de Janeiro-Brasil en el 2003.
Se debe considerar que hay tres fuentes principales de contaminación fecal humana del agua de mar de uso recreacional: desagües domésticos, descargas de ríos y otros cursos de agua, y directamente del bañista.
Para evaluar la calidad microbiana del agua de mar existen guías y normas de calidad que utilizan microorganismos indicadores, los cuales indirectamente sugieren la presencia potencial de microorganismos patógenos; una guía es la concentración máxima sugerida del indicador, que está asociada con riesgos inaceptables para la salud.
Las playas costeras de recreación veraniega son zonas de esparcimiento muy concurridas en los meses de verano y las actividades acuáticas brindan enormes beneficios, importantes para la recreación, salud y bienestar de las personas.
No sólo benefician a los lugareños, también atraen a numerosos turistas cuyos desembolsos favorecen a las economías locales.
Sin embargo, el baño en el agua de mar puede representar riesgos para la salud de los usuarios, debido a que las aguas pueden estar contaminadas con excretas humanas; las cuales pueden contener agentes patógenos causantes de infección, enfermedad y muerte.
La contaminación de playas en América Latina y el Caribe, causadas por descargas sin control de desagües domésticos no tratados, constituye un problema serio de salud para la población; en algunos casos son problemas permanentes de algunas playas y en otros son consecuencia de circunstancias excepcionales como el colapso del sistema de tuberías de desagüe que contaminó las playas de Río de Janeiro-Brasil en el 2003.
Se debe considerar que hay tres fuentes principales de contaminación fecal humana del agua de mar de uso recreacional: desagües domésticos, descargas de ríos y otros cursos de agua, y directamente del bañista.
Para evaluar la calidad microbiana del agua de mar existen guías y normas de calidad que utilizan microorganismos indicadores, los cuales indirectamente sugieren la presencia potencial de microorganismos patógenos; una guía es la concentración máxima sugerida del indicador, que está asociada con riesgos inaceptables para la salud.