La historia narrativa sobre el castillo de chapultepec / Necesito que me quepa en una hoja de cuaderno y va ilustrudado con estampas planeo usar dos. Miren esos puntos
México, D F, 24 de noviembre (apro)- Con una historia de más de 200 años, el Castillo de Chapultepec no sólo ha sido testigo y protagonista de la historia de México, sino también el espacio donde diariamente miles de escolares tienen contacto con ella a través de sus acervos
Luego de un trabajo de remodelación que comprendió la consolidación arquitectónica del inmueble, la restauración de sus colecciones y un nuevo diseño museográfico, el recinto reabrió al público las salas donde se narra la historia del país, a pocos meses de que el Museo Nacional de Historia (MNH) cumpla 60 años de vida
Fue el 27 de septiembre de 1944 cuando se inauguró el MNH en el emblemático castillo que hasta entonces había sido morada de los emperadores Maximiliano de Habsburgo y Carlota de Bélgica, así como de varios presidentes, entre ellos Miguel Miramón, Sebastián Lerdo de Tejada, Manuel González y Porfirio Díaz
La historia cuenta que tras la caída del Segundo Imperio, el liberal presidente Benito Juárez no quiso residir ahí y entregó las instalaciones al Colegio Militar Por ello, el castillo fue escenario de la batalla del 13 de septiembre de 1847 donde perdieron la vida varios jóvenes y adolescentes cadetes, entre ellos los seis que pasaron a la historia como los Niños Héroes
En el siglo XX lo habitaron desde Francisco I Madero hasta Abelardo L Rodríguez Y fue Lázaro Cárdenas quien consideró que debía ser la sede del MNH Según información del museo, su primer director fue el historiador José de Jesús Núñez y Domínguez, quien le dio una orientación didáctica con el objetivo de “destruir con nuestra instalación el antaño concepto de que los museos son cementerios de la historia”
El Proyecto de Reestructuración Museográfica del MNH se inició en 1998 y, según Luis Armando Haza, secretario administrativo del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) –a cuya red de museos pertenece el Castillo–, se han invertido de entonces a la fecha 203 millones de pesos tanto en los trabajos de arquitectura y restauración del inmueble, como de las salas y objetos de los acervos
La primera etapa, de 1998 al 2000 incluyó el rescate de las 23 salas del Alcázar, su jardín y terrazas, así como del llamado “Caballero Alto” La segunda y tercera etapas abarcaron los tres años que van de la presente administración, del 2000 al 2003, con una inversión de 111 millones de pesos
En la segunda se intervinieron la Galería de Historia, el Salón de los Niños Héroes “Batalla de Chapultepec”, la Casa de Guardias Imperiales, que se adaptó para oficinas, biblioteca, fototeca y videoteca Y la última abarcó la renovación de 15 salas, en las cuales se instalaron nuevos equipos de seguridad e iluminación y se creó un nuevo discurso historiográfico
El etnólogo Sergio Raúl Arroyo, director general del INAH, resumió los trabajos durante la ceremonia de apertura del Museo, realizada el lunes 17 de noviembre, en el sitio:
“Fue restaurado el edificio en sus estructuras, techumbres, cimientos, fachadas, así como en la totalidad de sus elementos arquitectónicos; se desarrollaron investigaciones arqueológicas con sorprendentes resultados: se construyeron depósitos para resguardar las colecciones y nuevas instalaciones hidráulicas, eléctricas y de seguridad Paralelamente, los historiadores actualizaron el discurso histórico recogiendo los avances de los últimos 30 años, y se puso en marcha un programa inédito de restauración de más de 60 mil piezas; los museógrafos diseñaron una estrategia de comunicación que potenciara los espacios con una clara integración que permitiera el acercamiento del público a las tres mil piezas que duplican el acervo en sala y también a las palabras que explican su aliento propio Hemos encontrado en la sobriedad el signo que define nuestro trabajo, buscando no convertir a la historia de México en juego de artificio o mero espectáculo”
México, D F, 24 de noviembre (apro)- Con una historia de más de 200 años, el Castillo de Chapultepec no sólo ha sido testigo y protagonista de la historia de México, sino también el espacio donde diariamente miles de escolares tienen contacto con ella a través de sus acervos
Luego de un trabajo de remodelación que comprendió la consolidación arquitectónica del inmueble, la restauración de sus colecciones y un nuevo diseño museográfico, el recinto reabrió al público las salas donde se narra la historia del país, a pocos meses de que el Museo Nacional de Historia (MNH) cumpla 60 años de vida
Fue el 27 de septiembre de 1944 cuando se inauguró el MNH en el emblemático castillo que hasta entonces había sido morada de los emperadores Maximiliano de Habsburgo y Carlota de Bélgica, así como de varios presidentes, entre ellos Miguel Miramón, Sebastián Lerdo de Tejada, Manuel González y Porfirio Díaz
La historia cuenta que tras la caída del Segundo Imperio, el liberal presidente Benito Juárez no quiso residir ahí y entregó las instalaciones al Colegio Militar Por ello, el castillo fue escenario de la batalla del 13 de septiembre de 1847 donde perdieron la vida varios jóvenes y adolescentes cadetes, entre ellos los seis que pasaron a la historia como los Niños Héroes
En el siglo XX lo habitaron desde Francisco I Madero hasta Abelardo L Rodríguez Y fue Lázaro Cárdenas quien consideró que debía ser la sede del MNH Según información del museo, su primer director fue el historiador José de Jesús Núñez y Domínguez, quien le dio una orientación didáctica con el objetivo de “destruir con nuestra instalación el antaño concepto de que los museos son cementerios de la historia”
El Proyecto de Reestructuración Museográfica del MNH se inició en 1998 y, según Luis Armando Haza, secretario administrativo del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) –a cuya red de museos pertenece el Castillo–, se han invertido de entonces a la fecha 203 millones de pesos tanto en los trabajos de arquitectura y restauración del inmueble, como de las salas y objetos de los acervos
La primera etapa, de 1998 al 2000 incluyó el rescate de las 23 salas del Alcázar, su jardín y terrazas, así como del llamado “Caballero Alto” La segunda y tercera etapas abarcaron los tres años que van de la presente administración, del 2000 al 2003, con una inversión de 111 millones de pesos
En la segunda se intervinieron la Galería de Historia, el Salón de los Niños Héroes “Batalla de Chapultepec”, la Casa de Guardias Imperiales, que se adaptó para oficinas, biblioteca, fototeca y videoteca Y la última abarcó la renovación de 15 salas, en las cuales se instalaron nuevos equipos de seguridad e iluminación y se creó un nuevo discurso historiográfico
El etnólogo Sergio Raúl Arroyo, director general del INAH, resumió los trabajos durante la ceremonia de apertura del Museo, realizada el lunes 17 de noviembre, en el sitio:
“Fue restaurado el edificio en sus estructuras, techumbres, cimientos, fachadas, así como en la totalidad de sus elementos arquitectónicos; se desarrollaron investigaciones arqueológicas con sorprendentes resultados: se construyeron depósitos para resguardar las colecciones y nuevas instalaciones hidráulicas, eléctricas y de seguridad Paralelamente, los historiadores actualizaron el discurso histórico recogiendo los avances de los últimos 30 años, y se puso en marcha un programa inédito de restauración de más de 60 mil piezas; los museógrafos diseñaron una estrategia de comunicación que potenciara los espacios con una clara integración que permitiera el acercamiento del público a las tres mil piezas que duplican el acervo en sala y también a las palabras que explican su aliento propio Hemos encontrado en la sobriedad el signo que define nuestro trabajo, buscando no convertir a la historia de México en juego de artificio o mero espectáculo”