Cuenta la leyenda, que la dama tapada es una extraña joven que siempre lleva su cara tapada, viste un vestido muy elegante y que lleva siempre consigo una sombrilla.
Se dice que cuando está cerca a la dama, despide un olor agradable que hace que uno se sienta atraído a ella y la siga.
Éste olor es tan agradable que uno pierde la noción del lugar hacia donde esta yendo. De alguna manera, la Dama tapada lleva a su incauto a fuera de las zonas urbanas lejos de la población o de alguna persona sin ser vistos.
Cuando están muy lejos de la ciudad, la dama se detiene y deja que se le acerquen. De pronto ella muestra su verdadero rostro que es la de una cadáver en estado de putrefacción.
En ese momento, el olor agradable se convierte en un olor nauseabundo y tan fuerte que de inmediato envenena el cuerpo de su víctima sin darle posibilidades de escapar de ella, y se dice que pocos pudieron salvarse de ella a pesar de su extremo olor o de la terrible sorpresa que ella manifiesta.
Cuenta la leyenda, que la dama tapada es una extraña joven que siempre lleva su cara tapada, viste un vestido muy elegante y que lleva siempre consigo una sombrilla.
Se dice que cuando está cerca a la dama, despide un olor agradable que hace que uno se sienta atraído a ella y la siga.
Éste olor es tan agradable que uno pierde la noción del lugar hacia donde esta yendo. De alguna manera, la Dama tapada lleva a su incauto a fuera de las zonas urbanas lejos de la población o de alguna persona sin ser vistos.
Cuando están muy lejos de la ciudad, la dama se detiene y deja que se le acerquen. De pronto ella muestra su verdadero rostro que es la de una cadáver en estado de putrefacción.
En ese momento, el olor agradable se convierte en un olor nauseabundo y tan fuerte que de inmediato envenena el cuerpo de su víctima sin darle posibilidades de escapar de ella, y se dice que pocos pudieron salvarse de ella a pesar de su extremo olor o de la terrible sorpresa que ella manifiesta.