Es un lugar formado por calles y encrucijadas, intencionadamente complejo para confundir a quien se adentre en él.
El laberinto -como construcción y símbolo- está presente en muchas tradiciones culturales de la humanidad.
Tal y como señala el escritor y semiótico italiano Umberto Eco: “la historia milenaria de este elemento revela la fascinación que siempre ha despertado en el hombre porque, de algún modo, le habla de la condición humana: existen infinitas situaciones en las que es fácil entrar pero de las que es difícil salir“.
Resulta sorprendente que el hombre haya creado espacios que representan su angustia ante las diversos interrogantes de la vida.
Son espacios que el hombre ha construido para escenificar sus preocupaciones ante la incógnita deldestino, la opción entre múltiples caminos, el perderse en los mundos burocráticos, o el sumergirse en su propia mente.
Es un lugar formado por calles y encrucijadas, intencionadamente complejo para confundir a quien se adentre en él.
El laberinto -como construcción y símbolo- está presente en muchas tradiciones culturales de la humanidad.
Tal y como señala el escritor y semiótico italiano Umberto Eco: “la historia milenaria de este elemento revela la fascinación que siempre ha despertado en el hombre porque, de algún modo, le habla de la condición humana: existen infinitas situaciones en las que es fácil entrar pero de las que es difícil salir“.
Resulta sorprendente que el hombre haya creado espacios que representan su angustia ante las diversos interrogantes de la vida.
Son espacios que el hombre ha construido para escenificar sus preocupaciones ante la incógnita deldestino, la opción entre múltiples caminos, el perderse en los mundos burocráticos, o el sumergirse en su propia mente.