A un señor se le cayeron al suelo los anteojos, que hicieron un ruido terrible al chocar con las baldosas. El señor se agachó alfigidísimo porque los cristales de anteojos costaban muy caro, pero descubrió con asombro que por milagro no se habían roto.
Ese señor se sintió profundamente agradecido y comprendió que lo ocurrido vale por una advertencia amistosa, de modo que se encaminó a una casa de óptica y adquirió en seguida un estuche de cuero almohadillado de doble protección, a fin de curarse en salud. Pasada una hora se le cayó el estuche, se agachó sin mayor inquietud y descubrió que los anteojos se le habían hecho polvo. A este señor le llevo un rato comprender que los designios de la Provincia son inescrutables y que en el realidad el milagro había ocurrió en ese momento.
Respuesta:
pero que se tiene que hacer??
Respuesta:
Creo yo que es así....↓
Explicación:
A un señor se le cayeron al suelo los anteojos, que hicieron un ruido terrible al chocar con las baldosas. El señor se agachó alfigidísimo porque los cristales de anteojos costaban muy caro, pero descubrió con asombro que por milagro no se habían roto.
Ese señor se sintió profundamente agradecido y comprendió que lo ocurrido vale por una advertencia amistosa, de modo que se encaminó a una casa de óptica y adquirió en seguida un estuche de cuero almohadillado de doble protección, a fin de curarse en salud. Pasada una hora se le cayó el estuche, se agachó sin mayor inquietud y descubrió que los anteojos se le habían hecho polvo. A este señor le llevo un rato comprender que los designios de la Provincia son inescrutables y que en el realidad el milagro había ocurrió en ese momento.