Me dan tantita informacion sobre la danza de la ofrenda otomi por favor
juandavinchiUna de las danzas religiosas mas populares dentro de la región mazahua es la ofrenda otomí, caracterízada por su música indígena, que en nos da la impresión de retroceder en el tiempo y estar frente a la mirada de nuestros ancestros participando con ellos, en sus tradiciones milenarias.Fuente: Ma. Isabel Peña SuárezEsta danza por su origen sea una mezcla indígena-colonial que bailan en las festividades que anualmente se celebran en diversos santuarios del Estado de México. A lado de Bo-Tzanga (lagartija negra) y Damishi (el jaguar), para ofrecer a Thaai mensajero supremo del agua y de la vida, del nuevo amanecer, de las flores y los frutos, el Be-Tze especie de charola de madera que significa el lugar donde se guarda lo sagrado y el alma del pueblo.
Fuente: suarezixtlamas
El vestuario de los danzantes: las mujeres camisa bordada y adornada con listones de la misma tela , falda larga de lana de color verde o azul, fajada a la cintura en forma de tablones por un señidor también de lana con grecas dibujadas, llevan en las manos un bastón con listones de colores y algunos cascabeles y no puede faltar un sombrero de palma adornado con flores de colores encendidos.Fuente: SuarezixtlamasFuente: SuarezixtlamasEste ritual resulta muy emotivo por el alto grado de espiritualidad que encierra así como la devoción con que se ofrece, lo que puede apreciarse en los diferentes centros ceremoniales tanto mazahua como otomí del Estado de México.
Fuente: suarezixtlamas
El vestuario de los danzantes: las mujeres camisa bordada y adornada con listones de la misma tela , falda larga de lana de color verde o azul, fajada a la cintura en forma de tablones por un señidor también de lana con grecas dibujadas, llevan en las manos un bastón con listones de colores y algunos cascabeles y no puede faltar un sombrero de palma adornado con flores de colores encendidos.Fuente: SuarezixtlamasFuente: SuarezixtlamasEste ritual resulta muy emotivo por el alto grado de espiritualidad que encierra así como la devoción con que se ofrece, lo que puede apreciarse en los diferentes centros ceremoniales tanto mazahua como otomí del Estado de México.