Unos de los primeros asentamientos humanos más conocidos y antiguos se encuentran en lo que hoy se conoce como Irak, la zona del Oriente Próximo ubicada entre los ríos Tigris y Éufrates, si bien se extiende a las zonas fértiles contiguas a la franja entre los 2 ríos, y que coincide aproximadamente con las áreas no desérticas del actual Irak y la zona limítrofe del noreste de Siria. El punto de cruce de estos dos ejes es la cuna de la primera civilización conocida. Viviendas, templos, utensilios y cerámica encontrados en diversos sitios datan en el quinto milenio antes de Cristo. Los nombres de ciudades como Ur o Nippur, de héroes legendarios como Gilgameš, del Código Hammurabi, de los asombrosos edificios conocidos como Zigurats, provienen de la Mesopotamia Antigua. Y episodios mencionados en la Biblia o en la Torá, como en Jardín del Eden, los del diluvio o la pérdida de idiomas de la Torre de Babel, ocurrieron en esta zona.
Unos de los primeros asentamientos humanos más conocidos y antiguos se encuentran en lo que hoy se conoce como Irak, la zona del Oriente Próximo ubicada entre los ríos Tigris y Éufrates, si bien se extiende a las zonas fértiles contiguas a la franja entre los 2 ríos, y que coincide aproximadamente con las áreas no desérticas del actual Irak y la zona limítrofe del noreste de Siria. El punto de cruce de estos dos ejes es la cuna de la primera civilización conocida. Viviendas, templos, utensilios y cerámica encontrados en diversos sitios datan en el quinto milenio antes de Cristo. Los nombres de ciudades como Ur o Nippur, de héroes legendarios como Gilgameš, del Código Hammurabi, de los asombrosos edificios conocidos como Zigurats, provienen de la Mesopotamia Antigua. Y episodios mencionados en la Biblia o en la Torá, como en Jardín del Eden, los del diluvio o la pérdida de idiomas de la Torre de Babel, ocurrieron en esta zona.