alumnos que posteriormente van a ser evaluados, y ya. No. Nosotros somos docentes
–docentes de matemática en su momentoy este rasgo debe caracterizar la forma de
construir nuestro pensamiento matemático.
¿Qué significa esto?
• La presencia constante de la meta
última de nuestro estudio: alcanzar unos
niveles de conocimiento tecnológico y reflexivo, lo cual debe abrir ese estudio hacia
la búsqueda de aplicaciones de lo aprendido, hacia el análisis de los sistemas que dan
forma a nuestra vida y utilizan ese conocimiento matemático, y hacia criterios sociales y éticos para juzgarlos.
• Construir el conocer de cada tópico
matemático pensando en cómo lo enseñamos en el aula, además de reflexionar acerca de cómo nuestro conocer limita y conA modo de introducción...,
nuestro recordatorio
diciona nuestro trabajo docente. De esta
forma, integrar nuestra práctica docente en
nuestro estudio.
• Como complemento a lo anterior,
construir el conocer de cada tópico matemático pensando en cómo lo podemos llevar al aula. Para ello, tomar conciencia del
proceso que seguimos para su construcción,
paso a paso, así como de los elementos
–cognitivos, actitudinales, emocionales…-
que se presenten en dicho proceso. Porque
a partir de esta experiencia reflexiva como
estudiantes, podremos entender y evaluar
mejor el desempeño de nuestros alumnos
–a su nivel- ante los mismos temas.
• En definitiva, entender que la matemática es la base de su didáctica: la forma
en que se construye el conocimiento matemático es una fuente imprescindible a la
hora de planificar y desarrollar su enseñanza.
Y ahora, vamos al tema de este Cuaderno, los cuerpos geométricos.
6
1.1. La idea del cuerpo geométrico
En el Cuaderno 12 escribíamos: “En nuestro derredor encontramos objetos naturales o
elaborados por personas; por ejemplo, una roca, una pelota de fútbol, una casa. Si pudiéramos meterlos ajustadamente en sendas cajas, de manera que cada objeto citado tocara
por dentro todas las caras de la caja en que está metida, sin deformarlas, nos daríamos
cuenta de que podríamos obtener, de tales objetos, tres medidas de longitud diferentes:
su largura, su anchura (profundidad) y su altura. Es decir, los objetos que ocupan un lugar
en el espacio físico tienen tres dimensiones. También tiene tres dimensiones el espacio
geométrico, representado por el espacio físico”.
Todos los seres y objetos de la naturaleza; y todos los artefactos elaborados en las distintas culturas, son tridimensionales. Todo lo que percibimos son objetos de tres dimensiones.
Ahora bien, cuando nos referimos a los cuerpos geométricos estamos haciendo alusión a aquellos objetos tridimensionales que tienen ciertas particularidades, ciertas formas
más sencillas, más elementales, más regulares; por ejemplo, los que presentan caras externas constituidas por polígonos o círculos, o los que tienen una forma parcial o totalmente
redonda... En este grupo quedan los objetos que tienen la apariencia de cajas, pirámides,
cilindros, conos, esferas, etc.
Así como en el plano estudiamos los polígonos, la circunferencia y el círculo, como
las figuras elementales dotadas de ciertas regularidades, también en el espacio nos restringiremos al estudio de cuerpos tridimensionales dotados de regularidades como las ya
mencionadas. Sin embargo, no se desdeña el estudio de los demás objetos tridimensionales; más bien se sugiere ver en cualquiera de ellos la posible semejanza con –o la posible
integración de- los cuerpos geométricos que se estudiarán con más detalle
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Respuesta: La sugerencia que proponíamos en
el Cuaderno Nº 1 y que siempre
presidirá los demás Cuadernos: Vamos a
estudiar matemática, pero no lo vamos a
hacer como si fuéramos simplemente unos
alumnos que posteriormente van a ser evaluados, y ya. No. Nosotros somos docentes
–docentes de matemática en su momentoy este rasgo debe caracterizar la forma de
construir nuestro pensamiento matemático.
¿Qué significa esto?
• La presencia constante de la meta
última de nuestro estudio: alcanzar unos
niveles de conocimiento tecnológico y reflexivo, lo cual debe abrir ese estudio hacia
la búsqueda de aplicaciones de lo aprendido, hacia el análisis de los sistemas que dan
forma a nuestra vida y utilizan ese conocimiento matemático, y hacia criterios sociales y éticos para juzgarlos.
• Construir el conocer de cada tópico
matemático pensando en cómo lo enseñamos en el aula, además de reflexionar acerca de cómo nuestro conocer limita y conA modo de introducción...,
nuestro recordatorio
diciona nuestro trabajo docente. De esta
forma, integrar nuestra práctica docente en
nuestro estudio.
• Como complemento a lo anterior,
construir el conocer de cada tópico matemático pensando en cómo lo podemos llevar al aula. Para ello, tomar conciencia del
proceso que seguimos para su construcción,
paso a paso, así como de los elementos
–cognitivos, actitudinales, emocionales…-
que se presenten en dicho proceso. Porque
a partir de esta experiencia reflexiva como
estudiantes, podremos entender y evaluar
mejor el desempeño de nuestros alumnos
–a su nivel- ante los mismos temas.
• En definitiva, entender que la matemática es la base de su didáctica: la forma
en que se construye el conocimiento matemático es una fuente imprescindible a la
hora de planificar y desarrollar su enseñanza.
Y ahora, vamos al tema de este Cuaderno, los cuerpos geométricos.
6
1.1. La idea del cuerpo geométrico
En el Cuaderno 12 escribíamos: “En nuestro derredor encontramos objetos naturales o
elaborados por personas; por ejemplo, una roca, una pelota de fútbol, una casa. Si pudiéramos meterlos ajustadamente en sendas cajas, de manera que cada objeto citado tocara
por dentro todas las caras de la caja en que está metida, sin deformarlas, nos daríamos
cuenta de que podríamos obtener, de tales objetos, tres medidas de longitud diferentes:
su largura, su anchura (profundidad) y su altura. Es decir, los objetos que ocupan un lugar
en el espacio físico tienen tres dimensiones. También tiene tres dimensiones el espacio
geométrico, representado por el espacio físico”.
Todos los seres y objetos de la naturaleza; y todos los artefactos elaborados en las distintas culturas, son tridimensionales. Todo lo que percibimos son objetos de tres dimensiones.
Ahora bien, cuando nos referimos a los cuerpos geométricos estamos haciendo alusión a aquellos objetos tridimensionales que tienen ciertas particularidades, ciertas formas
más sencillas, más elementales, más regulares; por ejemplo, los que presentan caras externas constituidas por polígonos o círculos, o los que tienen una forma parcial o totalmente
redonda... En este grupo quedan los objetos que tienen la apariencia de cajas, pirámides,
cilindros, conos, esferas, etc.
Así como en el plano estudiamos los polígonos, la circunferencia y el círculo, como
las figuras elementales dotadas de ciertas regularidades, también en el espacio nos restringiremos al estudio de cuerpos tridimensionales dotados de regularidades como las ya
mencionadas. Sin embargo, no se desdeña el estudio de los demás objetos tridimensionales; más bien se sugiere ver en cualquiera de ellos la posible semejanza con –o la posible
integración de- los cuerpos geométricos que se estudiarán con más detalle
Explicación: