julicameron
Lejos de ser animales exóticos, hermosos o entrañables, las tortugas son una pieza imprescindible para mantener ciertos ecosistemas, sobre todo los que tienen que ver con el agua, algo evidente. Así, aunque muchos prefieren ponerle precio por su exotismo, el precio que tienen para nuestro planeta es completamente incalculable.
Podemos decir que las tortugas marinas han jugado un papel realmente importante en la salud de nuestros océanos durante millones y millones de años. Sin ellas, funciones tan esenciales como el mantenimiento del ecosistema de los arrecifes o incluso el transporte de nutrientes a las playas sería imposible. Por este motivo su supervivencia es más importante de lo que piensan algunos. No se trata de una especie más en extinción, es una especie imprescindible.
Podemos dar muchísimos ejemplos de su importancia. Para empezar, en el momento en el que ponen sus huevos. Al anidar en las playas, estas grandes y colosales tortugas remueven miles de toneladas de arena. Esto consigue que las costas sean mucho más saludables. Además, esos huevos suponen una fuente de nutrientes para un sinfín de seres, desde insectos hasta aves. Por tanto, se puede decir que las tortugas marinas conectan el mar con la tierra.
Un ejemplo de la importancia de estas tortugas la encontramos con las tortugas verdes de mar. Pocos herbívoros de tal tamaño encontraremos en los océanos. Así, su principal función comienza con su principal necesidad, comer; y es que estas tortugas comen en las praderas marinas. Al pastar, aumentan la productividad y el contenido de nutrientes de todos estos pastos marinos. Si no comieran, con el tiempo, nos encontraríamos con pasos marinos completamente obstruidos, algo que repercutiría en infinidad de aspectos, como en las corrientes o incluso en la biodiversidad marina.
Otras tortugas se alimentan de animales marinos. Sin ellas, estos animales aumentarían en número llegando a convertirse en auténticas plagas. Un gran ejemplo de esto último son las medusas, que como podemos ver cada año aumentan considerablemente en número, debido principalmente a que cada vez hay menos tortugas marinas que se alimentan de ellas; y es que hay tortugas adultas que pueden comerse una tonelada de medusas al día, una aspiradora marina realmente importante.
No nos olvidemos de que las tortugas también suponen pequeños oasis flotantes para muchas otras especies que se aproximan a ellas para buscar un poco de resguardo de otros depredadores. Un gran oasis que poco a poco está desapareciendo de nuestro ecosistema y que puede tener muchas consecuencias negativas incluso para la pesca y por tanto para nuestro abastecimiento.
Podemos decir que las tortugas marinas han jugado un papel realmente importante en la salud de nuestros océanos durante millones y millones de años. Sin ellas, funciones tan esenciales como el mantenimiento del ecosistema de los arrecifes o incluso el transporte de nutrientes a las playas sería imposible. Por este motivo su supervivencia es más importante de lo que piensan algunos. No se trata de una especie más en extinción, es una especie imprescindible.
Podemos dar muchísimos ejemplos de su importancia. Para empezar, en el momento en el que ponen sus huevos. Al anidar en las playas, estas grandes y colosales tortugas remueven miles de toneladas de arena. Esto consigue que las costas sean mucho más saludables. Además, esos huevos suponen una fuente de nutrientes para un sinfín de seres, desde insectos hasta aves. Por tanto, se puede decir que las tortugas marinas conectan el mar con la tierra.
Un ejemplo de la importancia de estas tortugas la encontramos con las tortugas verdes de mar. Pocos herbívoros de tal tamaño encontraremos en los océanos. Así, su principal función comienza con su principal necesidad, comer; y es que estas tortugas comen en las praderas marinas. Al pastar, aumentan la productividad y el contenido de nutrientes de todos estos pastos marinos. Si no comieran, con el tiempo, nos encontraríamos con pasos marinos completamente obstruidos, algo que repercutiría en infinidad de aspectos, como en las corrientes o incluso en la biodiversidad marina.
Otras tortugas se alimentan de animales marinos. Sin ellas, estos animales aumentarían en número llegando a convertirse en auténticas plagas. Un gran ejemplo de esto último son las medusas, que como podemos ver cada año aumentan considerablemente en número, debido principalmente a que cada vez hay menos tortugas marinas que se alimentan de ellas; y es que hay tortugas adultas que pueden comerse una tonelada de medusas al día, una aspiradora marina realmente importante.
No nos olvidemos de que las tortugas también suponen pequeños oasis flotantes para muchas otras especies que se aproximan a ellas para buscar un poco de resguardo de otros depredadores. Un gran oasis que poco a poco está desapareciendo de nuestro ecosistema y que puede tener muchas consecuencias negativas incluso para la pesca y por tanto para nuestro abastecimiento.