La aparición de fuertes relaciones de amistad es una de las características más importantes de la adolescencia. Con frecuencia los padres de adolescentes viven con tristeza lo que en apariencia es un alejamiento de sus hijos pero esto no es así. Entender las claves de lo que significa el grupo de amigos para nuestros hijos adolescentes nos servirá a los padres para apoyar a los adolescentes en su crecimiento y para aceptar que nuestros hijos se van convirtiendo en adultos. Con el comienzo de la adolescencia, muchos chicos y chicas empiezan a preferir pasar más tiempo con sus amigos que con su familia. Y aunque algunos padres lo viven con tristeza deben entender que este es un proceso perfectamente natural que hará que nuestros hijos crezcan saludables. Es más, los adolescentes sin amigos suelen ser más solitarios e infelices y tienen mayores dificultades para pasar esta etapa.
¿Que obtienen los adolescentes de su grupo de amigos?
La búsqueda de la propia identidad. El inicio de la pubertad con el que comienza la adolescencia es también el momento en el que los seres humanos empiezan a buscar su propia identidad. Ya no son niños pero aún no son adultos. La familia que hasta hace nada era todo su mundo ahora se queda pequeña, necesitan salir al exterior, establecer nuevos contactos, crear redes de amigos, descubrir el mundo y su lugar en él. Y para eso es fundamental el grupo de amigos. Un grupo de semejantes. Los adolescentes suelen construir su grupo de amigos con chicos y chicas parecidos a ellos. Con las mismas aficiones, el mismo gusto por cierta ropa, iguales intereses, etc… Con adolescentes semejantes a ellos se encuentran cómodos y con ellos establecen sus relaciones de confianza y lealtad. Con ellos pueden hablar de todo lo que les pasa porque a ellos les están ocurriendo las mismas cosas. Sólo eso ya sería beneficioso para nuestros hijos porque gracias a sus amigos entienden que el proceso por el que ellos están pasando es natural y le ocurre a todo el mundo. Aceptación. Pero además, en medio de los cambios que experimentan los adolescentes no es importante solo saber que también a los otros les ocurren las mismas cosas, es fundamental ser aceptado como uno es. Y eso también lo proporciona el grupo de amigos. Independencia. Con frecuencia los padres se quejan de que sus hijos se limitan a seguir a sus amigos y son iguales a ellos en todo. Generalmente eso no es exactamente así. Como el grupo se forma entre iguales, todos ellos siguen lo que hacen los demás. Pero lo más importante es que aunque a nosotros nos parezca que son todos iguales, ellos están aprovechando su pertenencia al grupo para crear su identidad propia. La de un chico o chica que se encamina hacia el mundo de los adultos. Y aunque nos duela, hay una parte de ese proceso que es necesario que ellos hagan fuera de la familia.
¿Qué deben hacer los padres en relación con los amigos de sus hijos?
Conocerlos. Los padres de adolescentes deben conocer a los amigos de sus hijos. Como la influencia del grupo suele ser muy grande durante la adolescencia, cuanto mejor conozcas al grupo con el que sale tu hija o hijo adolescente será más fácil que evites que aparezcan problemas.Evitar los problemas. Es bueno que los padres de adolescentes estén atentos a las influencias del grupo sobre sus hijos. Lo habitual es que estas se limiten a cuestiones poco importantes como la forma de vestir, la música que se escucha o las aficiones que se practican. Pero puede ser que en algunos casos los chicos y chicas se dejen influir en cosas negativas como el consumo de drogas y alcohol u otras actividades delictivas o peligrosas. En ese caso, los padres deben intervenir inmediatamente. Y casi siempre es beneficioso buscar la ayuda de algún experto que los oriente. Los consejeros de la propia escuela de nuestros hijos o alguna de las múltiples asociaciones que existen dedicadas a proteger a la juventud de estos problemas podrán ayudarles. Pero en la mayoría de los casos, unos padres atentos a lo que hacen sus hijos y que mantienen con ellos una relación franca y de confianza podrán evitar esos graves problemas antes de que aparezcan o de que se conviertan en auténticas pesadillas.
La aparición de fuertes relaciones de amistad es una de las características más importantes de la adolescencia. Con frecuencia los padres de adolescentes viven con tristeza lo que en apariencia es un alejamiento de sus hijos pero esto no es así. Entender las claves de lo que significa el grupo de amigos para nuestros hijos adolescentes nos servirá a los padres para apoyar a los adolescentes en su crecimiento y para aceptar que nuestros hijos se van convirtiendo en adultos.
Con el comienzo de la adolescencia, muchos chicos y chicas empiezan a preferir pasar más tiempo con sus amigos que con su familia. Y aunque algunos padres lo viven con tristeza deben entender que este es un proceso perfectamente natural que hará que nuestros hijos crezcan saludables. Es más, los adolescentes sin amigos suelen ser más solitarios e infelices y tienen mayores dificultades para pasar esta etapa.
¿Que obtienen los adolescentes de su grupo de amigos?
La búsqueda de la propia identidad. El inicio de la pubertad con el que comienza la adolescencia es también el momento en el que los seres humanos empiezan a buscar su propia identidad. Ya no son niños pero aún no son adultos. La familia que hasta hace nada era todo su mundo ahora se queda pequeña, necesitan salir al exterior, establecer nuevos contactos, crear redes de amigos, descubrir el mundo y su lugar en él. Y para eso es fundamental el grupo de amigos.Un grupo de semejantes. Los adolescentes suelen construir su grupo de amigos con chicos y chicas parecidos a ellos. Con las mismas aficiones, el mismo gusto por cierta ropa, iguales intereses, etc… Con adolescentes semejantes a ellos se encuentran cómodos y con ellos establecen sus relaciones de confianza y lealtad. Con ellos pueden hablar de todo lo que les pasa porque a ellos les están ocurriendo las mismas cosas. Sólo eso ya sería beneficioso para nuestros hijos porque gracias a sus amigos entienden que el proceso por el que ellos están pasando es natural y le ocurre a todo el mundo.
Aceptación. Pero además, en medio de los cambios que experimentan los adolescentes no es importante solo saber que también a los otros les ocurren las mismas cosas, es fundamental ser aceptado como uno es. Y eso también lo proporciona el grupo de amigos.
Independencia. Con frecuencia los padres se quejan de que sus hijos se limitan a seguir a sus amigos y son iguales a ellos en todo. Generalmente eso no es exactamente así. Como el grupo se forma entre iguales, todos ellos siguen lo que hacen los demás. Pero lo más importante es que aunque a nosotros nos parezca que son todos iguales, ellos están aprovechando su pertenencia al grupo para crear su identidad propia. La de un chico o chica que se encamina hacia el mundo de los adultos. Y aunque nos duela, hay una parte de ese proceso que es necesario que ellos hagan fuera de la familia.
¿Qué deben hacer los padres en relación con los amigos de sus hijos?
Conocerlos. Los padres de adolescentes deben conocer a los amigos de sus hijos. Como la influencia del grupo suele ser muy grande durante la adolescencia, cuanto mejor conozcas al grupo con el que sale tu hija o hijo adolescente será más fácil que evites que aparezcan problemas.Evitar los problemas. Es bueno que los padres de adolescentes estén atentos a las influencias del grupo sobre sus hijos. Lo habitual es que estas se limiten a cuestiones poco importantes como la forma de vestir, la música que se escucha o las aficiones que se practican. Pero puede ser que en algunos casos los chicos y chicas se dejen influir en cosas negativas como el consumo de drogas y alcohol u otras actividades delictivas o peligrosas. En ese caso, los padres deben intervenir inmediatamente. Y casi siempre es beneficioso buscar la ayuda de algún experto que los oriente. Los consejeros de la propia escuela de nuestros hijos o alguna de las múltiples asociaciones que existen dedicadas a proteger a la juventud de estos problemas podrán ayudarles. Pero en la mayoría de los casos, unos padres atentos a lo que hacen sus hijos y que mantienen con ellos una relación franca y de confianza podrán evitar esos graves problemas antes de que aparezcan o de que se conviertan en auténticas pesadillas.