Kenavo
Sirve, igualmente, de hábitat a grupos de indígenas que viven en estado natural, tribus nómadas que se desplazan por toda la geografía yasunitana en complacencia a sus necesidades y costumbres atávicas que hay que respetar y conservar como sus derechos. Pero también es sitio de almacenamiento de petróleo, de una cantidad apreciable de crudo guardado en la profundidad del subsuelo, cuya explotación ha sido programada por el gobierno para la construcción de obras dirigidas a desarrollar el bienestar del país.Sin embargo, sectores ambientalistas han manifestado su oposición a esta decisión, creando una atmósfera de incertidumbre sobre esta intención que, se argumenta, afectaría mortalmente al sistema.En esta situación, si bien las voces contrarias apuntan a defender la biodiversidad, las necesidades del país demandan de los recursos explotables para su propia seguridad. Y es obligación de los mandantes asegurarla. Creemos, entonces, que el diálogo es la vía para encontrar la media que permita la conservación de la naturaleza, a la vez que el aprovechamiento de sus recursos para lograr el progreso ciudadano.