Su principal función es la de proteger al cuerpo de infecciones, heridas físicas y de la pérdida de calor y de agua. La piel de un gato está unida a las estructuras subyacentes de forma más débil que la de los humanos, lo que permite aumentar aún más su flexibilidad.
Respuesta:
Su principal función es la de proteger al cuerpo de infecciones, heridas físicas y de la pérdida de calor y de agua. La piel de un gato está unida a las estructuras subyacentes de forma más débil que la de los humanos, lo que permite aumentar aún más su flexibilidad.
Explicación: