En colaboración con B. Bartók, empezó en 1903 un estudio sobre la musicalidad folclórica balcánica en general, y magiar en particular. Su vinculación con la "Comuna" de 1919, durante la cual fue nombrado vicedirector de la Academia musical, le acarreó duras sanciones disciplinarias por parte de los gobiernos nacional-conservadores que le sucedieron, aunque en consideración a la creciente fama del músico, éstas fueron de breve duración.
Zoltán Kodály ejerció durante algún tiempo como director de orquesta y crítico musical. Entre 1931 y 1933 impartió clases de musicología étnica en el Ateneo de la capital húngara. Posteriormente, fue investido de numerosos cargos honoríficos y ejecutivos en su país, y respetado por todos los regímenes políticos que en él se fueron sucediendo.
La fama de Kodály quedó consagrada de manera definitiva en el año 1923 con su Psalmus hungaricus, partitura escrita para las conmemoraciones del cincuentenario de la unión de las ciudades de Buda, Pest y Obuda, en la que se compenetran figuraciones melódicas arcaicas y soluciones orquestales innovadoras. Estos elementos estaban destinados a fundirse aún más en las partituras posteriores, en un lenguaje simple, vinculado a las raíces étnicas, y tal vez por esto mismo, excesivamente "campesino", como en la leyenda escénica en cinco cuadros Háry János (1926) y en la suite para orquesta Danzas de Marosszék (1927) y las Danzas de Galanta (1933).
Pero donde Kodály consigue alejarse del colorismo demasiado reconocible como etnofónico para introducir, en cambio, los morfemas folclóricos en la "clásica" sintaxis culta, consigue no sólo anclarse más eficazmente en la esencia de la música húngara, sino que, además, infunde a sus obras una vitalidad universal. Desde esta perspectiva, destacan entre su producción la Sonata para violoncello solo (1915), el Te Deum para solista, coro y orquesta (1936) y la Missa brevis para coro mixto y órgano, compuesta entre 1944 y 1945.
Sus investigaciones sobre musicología étnica revisten una importancia fundamental. Kodály dio cuenta de ello en numerosos artículos, en antologías de canciones populares húngaras y rumanas y en el volumen Corpus musicae popularis hungaricae (1937, y ampliado en 1951). Su actividad en el campo de la educación musical llevó a su país a niveles no superados de alfabetización musical masiva, y a él se debe el origen del famoso "método Kodály".
Respuesta:
Zoltán Kodály
En colaboración con B. Bartók, empezó en 1903 un estudio sobre la musicalidad folclórica balcánica en general, y magiar en particular. Su vinculación con la "Comuna" de 1919, durante la cual fue nombrado vicedirector de la Academia musical, le acarreó duras sanciones disciplinarias por parte de los gobiernos nacional-conservadores que le sucedieron, aunque en consideración a la creciente fama del músico, éstas fueron de breve duración.
Zoltán Kodály ejerció durante algún tiempo como director de orquesta y crítico musical. Entre 1931 y 1933 impartió clases de musicología étnica en el Ateneo de la capital húngara. Posteriormente, fue investido de numerosos cargos honoríficos y ejecutivos en su país, y respetado por todos los regímenes políticos que en él se fueron sucediendo.
La fama de Kodály quedó consagrada de manera definitiva en el año 1923 con su Psalmus hungaricus, partitura escrita para las conmemoraciones del cincuentenario de la unión de las ciudades de Buda, Pest y Obuda, en la que se compenetran figuraciones melódicas arcaicas y soluciones orquestales innovadoras. Estos elementos estaban destinados a fundirse aún más en las partituras posteriores, en un lenguaje simple, vinculado a las raíces étnicas, y tal vez por esto mismo, excesivamente "campesino", como en la leyenda escénica en cinco cuadros Háry János (1926) y en la suite para orquesta Danzas de Marosszék (1927) y las Danzas de Galanta (1933).
Pero donde Kodály consigue alejarse del colorismo demasiado reconocible como etnofónico para introducir, en cambio, los morfemas folclóricos en la "clásica" sintaxis culta, consigue no sólo anclarse más eficazmente en la esencia de la música húngara, sino que, además, infunde a sus obras una vitalidad universal. Desde esta perspectiva, destacan entre su producción la Sonata para violoncello solo (1915), el Te Deum para solista, coro y orquesta (1936) y la Missa brevis para coro mixto y órgano, compuesta entre 1944 y 1945.
Sus investigaciones sobre musicología étnica revisten una importancia fundamental. Kodály dio cuenta de ello en numerosos artículos, en antologías de canciones populares húngaras y rumanas y en el volumen Corpus musicae popularis hungaricae (1937, y ampliado en 1951). Su actividad en el campo de la educación musical llevó a su país a niveles no superados de alfabetización musical masiva, y a él se debe el origen del famoso "método Kodály".
Explicación: Espero te sirva