En la Edad Antigua la urbanidad se relaciona con los modos refinados y modales correctos que se empleaban en Roma. Este comportamiento se convierte en un elemento diferenciador entre los miembros de la ciudad y los campesinos.
Esta manera de comportarse se aplicaba tanto en el ámbito familiar como social. Por ejemplo, los modales en la mesa, la vestimenta o la conversación.
En esta época uno de los rasgos fundamentales de la urbanidad hace referencia al decoro, una unión que sigue hoy en día.
Edad Media
Las ciudades de la Edad Media son pequeñas y sus habitantes conforman una nueva clase social, la burguesía. Este estamento marca su diferencia con el campesinado a través de su comportamiento.
Sin embargo, lo que más buscaba la alta burguesía con su conducta social era acercarse a la nobleza y a la aristocracia de la época. En este contexto, la urbanidad comienza a identificarse con la cortesía.
Además, en la Edad Media gracias al avance de la sociedad burguesa empiezan a aparecer los primeros manuales de urbanidad.Edad Moderna
Durante la Edad Moderna la urbanidad se alimenta del Humanismo. Erasmo de Rotterdam se convierte en uno de los propulsores del hombre educado como el ideal renacentista gracias a su primer código social destinado a la educación de los niños, De civilitate morum puerilium (1530).
Este hecho conlleva a que la urbanidad se implante como materia de estudio en el sistema educativo de Occidente y se convierta en uno de los rasgos distintivos de la alta aristocracia.
Edad Contemporánea
En la Edad Contemporánea la urbanidad adquiere una intencionalidad política.
Además, durante la segunda mitad del siglo XIX se produce otro cambio significativo en torno al significado de urbanidad y su ámbito de actuación: velar por la salud y prevenir la enfermedad.
Siglo XXI
En el siglo XXI seguimos identificando urbanidad con las normas sociales, es decir con las reglas de conducta que todo individuo debe contemplar.
También hay que añadir su enfoque educativo que convierte a la urbanidad del siglo XXI en una competencia social y ciudadana. Un contenido que está recogido en el Real Decreto 1513/2006 y en donde se explica que dicha competencia ayuda a comprender la realidad social, a convivir y a ejercer la ciudadanía democrática en una sociedad plural.
Respuesta:
Explicación:
Edad Antigua
En la Edad Antigua la urbanidad se relaciona con los modos refinados y modales correctos que se empleaban en Roma. Este comportamiento se convierte en un elemento diferenciador entre los miembros de la ciudad y los campesinos.
Esta manera de comportarse se aplicaba tanto en el ámbito familiar como social. Por ejemplo, los modales en la mesa, la vestimenta o la conversación.
En esta época uno de los rasgos fundamentales de la urbanidad hace referencia al decoro, una unión que sigue hoy en día.
Edad Media
Las ciudades de la Edad Media son pequeñas y sus habitantes conforman una nueva clase social, la burguesía. Este estamento marca su diferencia con el campesinado a través de su comportamiento.
Sin embargo, lo que más buscaba la alta burguesía con su conducta social era acercarse a la nobleza y a la aristocracia de la época. En este contexto, la urbanidad comienza a identificarse con la cortesía.
Además, en la Edad Media gracias al avance de la sociedad burguesa empiezan a aparecer los primeros manuales de urbanidad.Edad Moderna
Durante la Edad Moderna la urbanidad se alimenta del Humanismo. Erasmo de Rotterdam se convierte en uno de los propulsores del hombre educado como el ideal renacentista gracias a su primer código social destinado a la educación de los niños, De civilitate morum puerilium (1530).
Este hecho conlleva a que la urbanidad se implante como materia de estudio en el sistema educativo de Occidente y se convierta en uno de los rasgos distintivos de la alta aristocracia.
Edad Contemporánea
En la Edad Contemporánea la urbanidad adquiere una intencionalidad política.
Además, durante la segunda mitad del siglo XIX se produce otro cambio significativo en torno al significado de urbanidad y su ámbito de actuación: velar por la salud y prevenir la enfermedad.
Siglo XXI
En el siglo XXI seguimos identificando urbanidad con las normas sociales, es decir con las reglas de conducta que todo individuo debe contemplar.
También hay que añadir su enfoque educativo que convierte a la urbanidad del siglo XXI en una competencia social y ciudadana. Un contenido que está recogido en el Real Decreto 1513/2006 y en donde se explica que dicha competencia ayuda a comprender la realidad social, a convivir y a ejercer la ciudadanía democrática en una sociedad plural.