El Concilio Vaticano II resalta esta dimensión de la familia creyente (34). La tarea evangelizadora abarca dos aspectos: hacia dentro de sí misma constituyendo un efectivo lugar de catequesis, testimoniando la fe y el amor; hacia la comunidad eclesial por ese mismo testimonio.
El Concilio Vaticano II resalta esta dimensión de la familia creyente (34). La tarea evangelizadora abarca dos aspectos: hacia dentro de sí misma constituyendo un efectivo lugar de catequesis, testimoniando la fe y el amor; hacia la comunidad eclesial por ese mismo testimonio.