Todos los seres vivos, sean organismos unicelulares, plantas, hongos o animales, incluido el ser humano, comparten ciertas características comunes: todos son capaces de alimentarse, crecer y reproducirse, lo cual los distingue de los elementos no vivos de la naturaleza.
Explicación:
Todos los seres vivos, sean organismos unicelulares, plantas, hongos o animales, incluido el ser humano, comparten ciertas características comunes: todos son capaces de alimentarse, crecer y reproducirse, lo cual los distingue de los elementos no vivos de la naturaleza.