Los cuatro Evangelios relatan la resurrección de Jesús (Mateo 28:1-10; Marcos 16:1-8; Lucas 24:1-12; Juan 20:1-29).
Hallaron la tumba vacía
El sepulcro vacío ofreció a los discípulos la primera prueba de la resurrección de Jesús, una prueba todavía no refutada. Enterraron a Jesús cerca del lugar de la ejecución, en una tumba nueva fácil de encontrar (Juan 19:41, 42). Todos los relatos de los Evangelios concuerdan en que cuando los amigos de Jesús llegaron a la tumba la segunda mañana después de su muerte, el cuerpo había desaparecido (Mateo 28:1-7; Marcos 16:1-7; Lucas 24:1-3; Juan 20:1-10).
Los cuatro Evangelios relatan la resurrección de Jesús (Mateo 28:1-10; Marcos 16:1-8; Lucas 24:1-12; Juan 20:1-29).
Hallaron la tumba vacía
El sepulcro vacío ofreció a los discípulos la primera prueba de la resurrección de Jesús, una prueba todavía no refutada. Enterraron a Jesús cerca del lugar de la ejecución, en una tumba nueva fácil de encontrar (Juan 19:41, 42). Todos los relatos de los Evangelios concuerdan en que cuando los amigos de Jesús llegaron a la tumba la segunda mañana después de su muerte, el cuerpo había desaparecido (Mateo 28:1-7; Marcos 16:1-7; Lucas 24:1-3; Juan 20:1-10).