La primera ley de Newton – El principio de inercia
La primera ley de Newton establece que un cuerpo solo varía su velocidad si actúa sobre él una fuerza externa. La inercia es la tendencia de un cuerpo a seguir en el estado en el que se encuentra.
Según esta primera ley, un cuerpo no puede cambiar por sí mismo su estado; para que salga del reposo (velocidad nula) o de un movimiento rectilíneo uniforme, es necesario que alguna fuerza actúe sobre él.
Por lo tanto, si no se aplica ninguna fuerza y un cuerpo se encuentra en estado de reposo, se mantendrá de este modo; si un cuerpo estaba en movimiento, lo seguirá estando con un movimiento uniforme a velocidad constante.
Por ejemplo: Un hombre deja su auto estacionado en la puerta de su casa. Ninguna fuerza actúa sobre el auto. Al día siguiente, el auto sigue allí.
Newton extrae la idea de inercia del físico italiano, Galileo Galilei (Diálogo sobre los dos grandes sistemas del mundo -1632).
La segunda ley de Newton – El principio fundamental de la dinámica
La segunda ley de Newton establece que existe una relación entre la fuerza ejercida sobre un cuerpo y su aceleración. Esta relación es de tipo directa y proporcional, es decir, la fuerza que se ejerce sobre un cuerpo es directamente proporcional a la aceleración que tendrá.
Por ejemplo: Cuanto más fuerza aplique Juan al patear la pelota, más chances hay de que la pelota cruce la mitad de la cancha porque mayor será su aceleración.
La aceleración depende de la magnitud, dirección y sentido de la fuerza total aplicada, y de la masa del objeto.
Puede servirte: ¿Cómo se calcula la aceleración?
La tercera ley de Newton – El principio de acción y reacción
La tercera ley de Newton establece que cuando un cuerpo ejerce una fuerza sobre otro, este último responde con una reacción de igual magnitud y dirección pero en sentido opuesto. A la fuerza que ejerce la acción le corresponde una reacción.
Por ejemplo: Cuando un hombre tropieza con una mesa, este recibirá de la mesa la misma fuerza que él le aplicó con el golpe.
Respuesta:
La primera ley de Newton – El principio de inercia
La primera ley de Newton establece que un cuerpo solo varía su velocidad si actúa sobre él una fuerza externa. La inercia es la tendencia de un cuerpo a seguir en el estado en el que se encuentra.
Según esta primera ley, un cuerpo no puede cambiar por sí mismo su estado; para que salga del reposo (velocidad nula) o de un movimiento rectilíneo uniforme, es necesario que alguna fuerza actúe sobre él.
Por lo tanto, si no se aplica ninguna fuerza y un cuerpo se encuentra en estado de reposo, se mantendrá de este modo; si un cuerpo estaba en movimiento, lo seguirá estando con un movimiento uniforme a velocidad constante.
Por ejemplo: Un hombre deja su auto estacionado en la puerta de su casa. Ninguna fuerza actúa sobre el auto. Al día siguiente, el auto sigue allí.
Newton extrae la idea de inercia del físico italiano, Galileo Galilei (Diálogo sobre los dos grandes sistemas del mundo -1632).
La segunda ley de Newton – El principio fundamental de la dinámica
La segunda ley de Newton establece que existe una relación entre la fuerza ejercida sobre un cuerpo y su aceleración. Esta relación es de tipo directa y proporcional, es decir, la fuerza que se ejerce sobre un cuerpo es directamente proporcional a la aceleración que tendrá.
Por ejemplo: Cuanto más fuerza aplique Juan al patear la pelota, más chances hay de que la pelota cruce la mitad de la cancha porque mayor será su aceleración.
La aceleración depende de la magnitud, dirección y sentido de la fuerza total aplicada, y de la masa del objeto.
Puede servirte: ¿Cómo se calcula la aceleración?
La tercera ley de Newton – El principio de acción y reacción
La tercera ley de Newton establece que cuando un cuerpo ejerce una fuerza sobre otro, este último responde con una reacción de igual magnitud y dirección pero en sentido opuesto. A la fuerza que ejerce la acción le corresponde una reacción.
Por ejemplo: Cuando un hombre tropieza con una mesa, este recibirá de la mesa la misma fuerza que él le aplicó con el golpe.