La expulsión de los jesuitas de España de 1767 fue ordenada por el rey Carlos III bajo la acusación de haber sido los instigadores de los motines populares del año anterior, conocidos con el nombre de Motín de Esquilache. Seis años después el monarca español consiguió que el papa Clemente XIV suprimiera la orden de los jesuitas. Fue restablecida por Pío VII el 7 de agosto de 1814 y Fernando VII les permitió el regreso a España el 15 de mayo de 1815,[1] pero los jesuitas serían expulsados de España dos veces más, en 1835, durante la Regencia de María Cristina de Borbón, y en 1932, bajo la Segunda República Española.
Respuesta:
El Rey Carlos III
Explicación:
La expulsión de los jesuitas de España de 1767 fue ordenada por el rey Carlos III bajo la acusación de haber sido los instigadores de los motines populares del año anterior, conocidos con el nombre de Motín de Esquilache. Seis años después el monarca español consiguió que el papa Clemente XIV suprimiera la orden de los jesuitas. Fue restablecida por Pío VII el 7 de agosto de 1814 y Fernando VII les permitió el regreso a España el 15 de mayo de 1815,[1] pero los jesuitas serían expulsados de España dos veces más, en 1835, durante la Regencia de María Cristina de Borbón, y en 1932, bajo la Segunda República Española.