1. Mutualismo facultativo.- Uno de los ejemplos más importantes, es la relación hombre – perro, en el cual el hombre busca compañía el animal busca una persona que lo proteja, en este caso esta unión se da de forma natural y sin embargo ambos pueden sobrevivir.
2. Mutualismo obligatorio.- Las relaciones de mutualismo obligatorio en ocasiones son mucho más comunes, el claro ejemplo son las abejas y las plantas, ambos necesitan de uno u otro para sobrevivir.
3. Entre los organismos que presentan relaciones mutualistas, se encuentran los líquenes, que son una combinación de algas y hongos que forman una relación simbiótica, ya que ni el alga ni el hongo pueden vivir de manera separadas la una de la otra, ya que están adaptadas al medio asociados en el que viven.
4. La mayor parte de las flores de las plantas son polinizadas por insectos a cambio de néctar o polen, que las plantas ofrecen de cierta manera a dichos seres vivos a cambio de la ayuda que prestan en la polinización, adaptándose tanto las plantas como los insectos (también aves como el colibrí), a este estado de dependencia mutua, ayudándose unos en la reproducción y otros en la provisión de alimentos, habiendo casos en los que una especie en particular de planta o insecto está adaptado de manera exclusiva a coexistir con una especie en particular de manera simbiótica o en un estado de dependencia mutua.
5. Otro ejemplo es el del pez payaso que vive en arrecifes coralinos donde abundan las anémonas, tomando refugio el pen entre las anémonas escondiéndose de depredadores entre los tentáculos de estos animales ya que las anemonas producen una sustancia mucilaginosa que las recubre con la que se protegen de una sustancia urticante que usan para protegerse de depredadores, el pez aprovecha ese mismo mucílago para cubrirse y no ser afectado por la sustancia urticante de la anémona, obteniendo el pez payaso un beneficio que es la protección frente a depredadores y la anémona obtiene a cambio también protección, ya que el pez la protege de peces que consumen anémonas ahuyentándolos
6. Otro ejemplo de mutualismo lo podemos observar en los langostinos, que son limpiadores de ectoparásitos que se encuentran en la piel de varios peces, por lo que cumplen una función “médica” evitando que los peces afectados por parásitos cutáneos enfermen y a su vez se alimentan (de los parásitos), Se ha observado que tanto el pez como el langostino presentan ciertas pautas de comportamiento que les permiten reconocerse mutuamente con lo que se evitan ataques.
7. Otro caso de mutualismo se da entre el “pájaro de la miel” quien llama la atención de un tejón melífero (Mellivora capensis) indicándole dónde existen panales de abejas silvestres, siendo seguidos por los tejones melíferos, quienes parecen comprender sus llamados o indicaciones, y una vez localizado el panal por el tejón y destruido el panal, obteniendo así el tejón la miel, el pájaro aprovecha que los insectos han quedado al descubierto y se aliemnta de ellos.
8. Otro ejemplo es el de la anémona Calliactis parasítica y el cangrejo ermitaño Dardanus calidus, en donde el cangrejo obtienen la protección de las sustancias urticantes de los tentáculos de la anemona, y la anémona obtiene mayor posibilidad de alimentarse gracias a los desplazamientos que realiza el cangrejo con la anemona a cuestas, así como al alimentarse de los restos de comida que deja el cangrejo.
1. Mutualismo facultativo.- Uno de los ejemplos más importantes, es la relación hombre – perro, en el cual el hombre busca compañía el animal busca una persona que lo proteja, en este caso esta unión se da de forma natural y sin embargo ambos pueden sobrevivir.
2. Mutualismo obligatorio.- Las relaciones de mutualismo obligatorio en ocasiones son mucho más comunes, el claro ejemplo son las abejas y las plantas, ambos necesitan de uno u otro para sobrevivir.
3. Entre los organismos que presentan relaciones mutualistas, se encuentran los líquenes, que son una combinación de algas y hongos que forman una relación simbiótica, ya que ni el alga ni el hongo pueden vivir de manera separadas la una de la otra, ya que están adaptadas al medio asociados en el que viven.
4. La mayor parte de las flores de las plantas son polinizadas por insectos a cambio de néctar o polen, que las plantas ofrecen de cierta manera a dichos seres vivos a cambio de la ayuda que prestan en la polinización, adaptándose tanto las plantas como los insectos (también aves como el colibrí), a este estado de dependencia mutua, ayudándose unos en la reproducción y otros en la provisión de alimentos, habiendo casos en los que una especie en particular de planta o insecto está adaptado de manera exclusiva a coexistir con una especie en particular de manera simbiótica o en un estado de dependencia mutua.
5. Otro ejemplo es el del pez payaso que vive en arrecifes coralinos donde abundan las anémonas, tomando refugio el pen entre las anémonas escondiéndose de depredadores entre los tentáculos de estos animales ya que las anemonas producen una sustancia mucilaginosa que las recubre con la que se protegen de una sustancia urticante que usan para protegerse de depredadores, el pez aprovecha ese mismo mucílago para cubrirse y no ser afectado por la sustancia urticante de la anémona, obteniendo el pez payaso un beneficio que es la protección frente a depredadores y la anémona obtiene a cambio también protección, ya que el pez la protege de peces que consumen anémonas ahuyentándolos
6. Otro ejemplo de mutualismo lo podemos observar en los langostinos, que son limpiadores de ectoparásitos que se encuentran en la piel de varios peces, por lo que cumplen una función “médica” evitando que los peces afectados por parásitos cutáneos enfermen y a su vez se alimentan (de los parásitos), Se ha observado que tanto el pez como el langostino presentan ciertas pautas de comportamiento que les permiten reconocerse mutuamente con lo que se evitan ataques.
7. Otro caso de mutualismo se da entre el “pájaro de la miel” quien llama la atención de un tejón melífero (Mellivora capensis) indicándole dónde existen panales de abejas silvestres, siendo seguidos por los tejones melíferos, quienes parecen comprender sus llamados o indicaciones, y una vez localizado el panal por el tejón y destruido el panal, obteniendo así el tejón la miel, el pájaro aprovecha que los insectos han quedado al descubierto y se aliemnta de ellos.
8. Otro ejemplo es el de la anémona Calliactis parasítica y el cangrejo ermitaño Dardanus calidus, en donde el cangrejo obtienen la protección de las sustancias urticantes de los tentáculos de la anemona, y la anémona obtiene mayor posibilidad de alimentarse gracias a los desplazamientos que realiza el cangrejo con la anemona a cuestas, así como al alimentarse de los restos de comida que deja el cangrejo.