La democratización del ciberespacio es el proceso por el cual se facilita el acceso popular a Internet y al ciberespacio mediante la distribución masificada de tecnología. La llegada de los intereses comerciales y de las grandes corporaciones económicas a Internet no se hizo esperar, no sólo en contenidos sino también en sus ansias de dominio de lo que había sido concebido como un espacio público.
De todos los derechos que los ciudadanos de cualquier país deben tener asegurados y protegidos en Internet, el derecho a la libre expresión y el derecho a la intimidad y la privacidad personales son los más fundamentales
Internet es un hervidero de iniciativas poéticas. Revistas, plataformas, archivos sonoros y archivos audiovisuales, blogs y páginas de poetas y asimilados inundan el ciberespacio, se mezclan con poemarios “para descarga” y se cuelan en facebook y en otras redes sociales con la soltura y la displicencia que concede la plena disposición de uso de ese territorio virtual. Tal abundancia de contenidos, que también se produce en otros géneros, especialmente en el relato, hace que el lector mínimamente riguroso, en ver de sentirse feliz y satisfecho, se sienta abrumado.
Respuesta:
Democratización del Ciberespacio:
La democratización del ciberespacio es el proceso por el cual se facilita el acceso popular a Internet y al ciberespacio mediante la distribución masificada de tecnología. La llegada de los intereses comerciales y de las grandes corporaciones económicas a Internet no se hizo esperar, no sólo en contenidos sino también en sus ansias de dominio de lo que había sido concebido como un espacio público.
De todos los derechos que los ciudadanos de cualquier país deben tener asegurados y protegidos en Internet, el derecho a la libre expresión y el derecho a la intimidad y la privacidad personales son los más fundamentales
Internet es un hervidero de iniciativas poéticas. Revistas, plataformas, archivos sonoros y archivos audiovisuales, blogs y páginas de poetas y asimilados inundan el ciberespacio, se mezclan con poemarios “para descarga” y se cuelan en facebook y en otras redes sociales con la soltura y la displicencia que concede la plena disposición de uso de ese territorio virtual. Tal abundancia de contenidos, que también se produce en otros géneros, especialmente en el relato, hace que el lector mínimamente riguroso, en ver de sentirse feliz y satisfecho, se sienta abrumado.