El cambio climático constituye una amenaza directa a la capacidad de los niños para sobrevivir, crecer y prosperar.
Fenómenos meteorológicos extremos como los ciclones y las olas de calor, que cada vez son más frecuentes e intensos, ponen en peligro las vidas de los niños y amenazan con destruir infraestructuras esenciales para su bienestar. Las inundaciones ponen en riesgo las instalaciones de abastecimiento de agua y saneamiento, favoreciendo la aparición de enfermedades como el cólera, al cual los niños son particularmente vulnerables.
ambiental.
UNICEF colabora con sus aliados mundiales y locales para lograr que los niños puedan vivir en un medio ambiente seguro y limpio. Nuestras actividades se estructuran alrededor de cuatro estrategias:
1. Dar la máxima prioridad a los niños en las estrategias y los planes de n respuesta al cambio climático
UNICEF colabora con gobiernos y asociados a nivel mundial para garantizar que los niños constituyan una parte esencial de las estrategias relativas al cambio climático y los planes de respuesta a los desastres.
En Bolivia, por ejemplo, UNICEF apoyó la Cumbre de la Juventud sobre Agua y Cambio Climático para reforzar el liderazgo de los jóvenes en lo que se refiere a adaptación al cambio climático y gestión integrada de los recursos hídricos. En Papúa Nueva Guinea, los niños están participando activamente en la formulación de planes de respuesta a los desastres climáticos para sus escuelas.
2. Reconocer a los niños como agentes de cambio
La participación de los niños en cuestiones que los afectan forma parte de sus derechos fundamentales (Artículo 12, Convención sobre los Derechos del Niño). UNICEF colabora con los jóvenes haciendo oír sus voces sobre el cambio climático, por medio de plataformas creativas, actividades de promoción, y participación en las principales cumbres de las Naciones Unidas.
Los niños y los jóvenes también pueden desempeñar un papel clave en la lucha contra los riesgos asociados con el clima, promoviendo estilos de vida ambientalmente sostenibles y sirviendo de ejemplo a sus comunidades
3. Proteger a los niños contra el impacto del cambio climático y la degradación del medio ambiente
UNICEF apoya iniciativas con las que se busca que las escuelas, los centros de salud, las instalaciones de abastecimiento de agua y saneamiento –y otros servicios indispensables para el bienestar de los niños– sean resistentes a las perturbaciones climáticas y ambientales. Esto no solo mejora la resiliencia de los niños frente a futuras calamidades; también hace menos probable que el cambio climático agudice las desigualdades actuales. Específicamente, nuestro objetivo es respaldar a los gobiernos en los siguientes ámbitos:
4. Reducir las emisiones y la contaminación
Tomar medidas decisivas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero a fin de frenar y, a la larga, detener el avance del cambio climático es crucial para solucionar la crisis climática antes de que sea demasiado tarde.
Verified answer
Respuesta:
El cambio climático constituye una amenaza directa a la capacidad de los niños para sobrevivir, crecer y prosperar.
Fenómenos meteorológicos extremos como los ciclones y las olas de calor, que cada vez son más frecuentes e intensos, ponen en peligro las vidas de los niños y amenazan con destruir infraestructuras esenciales para su bienestar. Las inundaciones ponen en riesgo las instalaciones de abastecimiento de agua y saneamiento, favoreciendo la aparición de enfermedades como el cólera, al cual los niños son particularmente vulnerables.
ambiental.
UNICEF colabora con sus aliados mundiales y locales para lograr que los niños puedan vivir en un medio ambiente seguro y limpio. Nuestras actividades se estructuran alrededor de cuatro estrategias:
1. Dar la máxima prioridad a los niños en las estrategias y los planes de n respuesta al cambio climático
UNICEF colabora con gobiernos y asociados a nivel mundial para garantizar que los niños constituyan una parte esencial de las estrategias relativas al cambio climático y los planes de respuesta a los desastres.
En Bolivia, por ejemplo, UNICEF apoyó la Cumbre de la Juventud sobre Agua y Cambio Climático para reforzar el liderazgo de los jóvenes en lo que se refiere a adaptación al cambio climático y gestión integrada de los recursos hídricos. En Papúa Nueva Guinea, los niños están participando activamente en la formulación de planes de respuesta a los desastres climáticos para sus escuelas.
2. Reconocer a los niños como agentes de cambio
La participación de los niños en cuestiones que los afectan forma parte de sus derechos fundamentales (Artículo 12, Convención sobre los Derechos del Niño). UNICEF colabora con los jóvenes haciendo oír sus voces sobre el cambio climático, por medio de plataformas creativas, actividades de promoción, y participación en las principales cumbres de las Naciones Unidas.
Los niños y los jóvenes también pueden desempeñar un papel clave en la lucha contra los riesgos asociados con el clima, promoviendo estilos de vida ambientalmente sostenibles y sirviendo de ejemplo a sus comunidades
3. Proteger a los niños contra el impacto del cambio climático y la degradación del medio ambiente
UNICEF apoya iniciativas con las que se busca que las escuelas, los centros de salud, las instalaciones de abastecimiento de agua y saneamiento –y otros servicios indispensables para el bienestar de los niños– sean resistentes a las perturbaciones climáticas y ambientales. Esto no solo mejora la resiliencia de los niños frente a futuras calamidades; también hace menos probable que el cambio climático agudice las desigualdades actuales. Específicamente, nuestro objetivo es respaldar a los gobiernos en los siguientes ámbitos:
4. Reducir las emisiones y la contaminación
Tomar medidas decisivas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero a fin de frenar y, a la larga, detener el avance del cambio climático es crucial para solucionar la crisis climática antes de que sea demasiado tarde.
Explicación:
ESPERO Y TE AYUDE