Una vez que decidas si tu pregunta de opción múltiple tendrá una respuesta simple o respuestas múltiples, podrás decidir si quieres usar una de las muchas variedades de pregunta de opción múltiple.
Por ejemplo, si agregas una opción de respuesta “Otra” o un campo de comentarios, puedes compensar una desventaja común que surge al usar una pregunta de opción múltiple. Cuando ofreces a los encuestados una lista fija de opciones de respuesta, los obligas a seleccionar solo entre las opciones que brindas, lo cual puede sesgar tus resultados.
¿Y si no ofreces a alguien la opción de respuesta que realmente quiere dar? Esta persona podría terminar eligiendo una respuesta de la lista de opciones con la que no está de acuerdo, lo cual puede afectar la integridad de tus resultados.
Una manera de abordar este problema es ofrecer varias opciones de respuesta pero también brindarles a los encuestados la posibilidad de escribir su propia respuesta personalizada. Cuando redactes la encuesta, simplemente marca la casilla “Agregar una opción de respuesta ‘Otra’ o un campo para comentarios”, y los encuestados podrán usar estas opciones.
Podrás ver los comentarios escritos en la herramienta de análisis, pero tendrás que hacer trabajo adicional para separar cada respuesta escrita. Ten en cuenta que los encuestados deberían ver la opción “Otra” como último recurso. Si demasiadas personas escriben sus propias respuestas, podrás hacer menos comparaciones entre tus opciones de respuesta principales.
Las preguntas de escala de valoración muestran una escala con cualquier rango (de 0 a 10, de 1 a 5, de 0 a 100, etc.) y solicitan a los encuestados seleccionar el punto numérico de la escala que presenta mejor sus respuestas.
Para que los encuestados comprendan una escala de valoración, debes hacer explícita la relación entre los números de la escala y los conceptos que estos miden, ya sea en la pregunta o en la misma escala de valoración.
Respuesta:
Una vez que decidas si tu pregunta de opción múltiple tendrá una respuesta simple o respuestas múltiples, podrás decidir si quieres usar una de las muchas variedades de pregunta de opción múltiple.
Por ejemplo, si agregas una opción de respuesta “Otra” o un campo de comentarios, puedes compensar una desventaja común que surge al usar una pregunta de opción múltiple. Cuando ofreces a los encuestados una lista fija de opciones de respuesta, los obligas a seleccionar solo entre las opciones que brindas, lo cual puede sesgar tus resultados.
¿Y si no ofreces a alguien la opción de respuesta que realmente quiere dar? Esta persona podría terminar eligiendo una respuesta de la lista de opciones con la que no está de acuerdo, lo cual puede afectar la integridad de tus resultados.
Una manera de abordar este problema es ofrecer varias opciones de respuesta pero también brindarles a los encuestados la posibilidad de escribir su propia respuesta personalizada. Cuando redactes la encuesta, simplemente marca la casilla “Agregar una opción de respuesta ‘Otra’ o un campo para comentarios”, y los encuestados podrán usar estas opciones.
Podrás ver los comentarios escritos en la herramienta de análisis, pero tendrás que hacer trabajo adicional para separar cada respuesta escrita. Ten en cuenta que los encuestados deberían ver la opción “Otra” como último recurso. Si demasiadas personas escriben sus propias respuestas, podrás hacer menos comparaciones entre tus opciones de respuesta principales.
Las preguntas de escala de valoración muestran una escala con cualquier rango (de 0 a 10, de 1 a 5, de 0 a 100, etc.) y solicitan a los encuestados seleccionar el punto numérico de la escala que presenta mejor sus respuestas.
Para que los encuestados comprendan una escala de valoración, debes hacer explícita la relación entre los números de la escala y los conceptos que estos miden, ya sea en la pregunta o en la misma escala de valoración.