África es un continente muy cercano a nosotros, pero mucho más extenso y muy diferente. De hecho, tiene más de 30 millones de kilómetros cuadrados divididos en 54 países y un total de mil millones de habitantes, unas cifras muy superiores a las que nos encontramos en los países occidentales.
Viajar es un placer, pero para disfrutar al máximo es importante planificar y conocer los riesgos. Algunos países han vivido situaciones convulsas en los últimos tiempos, por eso es importante que estés bien informado/a. Hemos preparado una guía gratuita con algunos consejos para viajar y con información detallada de la situación actual de algunos países como: Angola, Eritrea, Etiopia, Tanzania, Zambia y muchos más
En África occidental surgieron una serie de reinos de raza negra cuya base económica yacía en el control de las rutas comerciales transaharianas. Se enviaban al norte oro, nueces de kola y esclavos a cambio de ropas, utensilios y sal.
Ghana
El primero de estos reinos, Ghana, comenzó a existir el siglo V en lo que hoy es el sureste de Mauritania; su capital, Kumbi Saleh, ha sido excavada en tiempos modernos. Ya en el siglo XI, los ejércitos de Ghana, equipados con armas de hierro, se adueñaron de las rutas de comercio que se extienden desde el actual Marruecos a los bosques costeros de África occidental al sur.
Los bereberes nómadas de la confederación sanhaja (la actual Mauritania central) formaban el nexo principal entre Ghana y el norte. Una vez que los árabes consiguieron controlar las costas del noroeste, comenzaron a explotar estas rutas comerciales. A principios del siglo XI había consejeros musulmanes en la corte de Ghana, y los mercaderes musulmanes vivían en grandes barrios de extranjeros desde los que dirigían un comercio a gran escala muy lucrativo.
En el siglo XI, Ghana fue destruida por los almorávides, una belicosa facción musulmana fundada entre los bereberes sanhaja. A principios del siglo XI se alzaron en guerra santa (yihad) y controlaron las rutas de caravanas del Sahara. Entonces el movimiento se separó; un grupo avanzó hacia el norte para conquistar Marruecos y España, mientras que el otro se dirigió al sur para destruir (en el año 1076) la capital de Ghana. Durante el siglo siguiente el pueblo Soso de Futa Yallon, anteriormente vasallos de Ghana, tomó el control del área, pero fueron conquistados a su vez por los pueblos de Mali en el año 1240 aproximadamente.
Mali y Songhai
En el centro de las cuencas altas de los ríos Senegal y Níger, Mali evolucionó a principios del siglo XI a partir de un grupo de las tribus mande. A mediados del siglo XIII, el reino comenzó un periodo de expansión bajo el vigoroso monarca Sundiata. Se supone que poco después los gobernantes de Mali se convirtieron al islam. El imperio Mali alcanzó su punto culminante bajo el mansa (rey) Musa, que condujo una peregrinación a La Meca en 1324-1325, inició relaciones diplomáticas con Túnez y Egipto, y llevó a varios eruditos y sabios musulmanes a su imperio; a partir de la época de Mansa Musa, Mali apareció en los mapas de Europa.
Después de 1400, el imperio decayó y Songhai se convirtió en el reino más importante del Sudán occidental. Aunque Songhai data de antes del siglo IX, su gran periodo de expansión se produjo con el reinado de Sunni Ali y Askia Muhammad. Durante el reinado de este último el islam prosperó en la corte, y Tombuctu se convirtió en el mayor centro de la cultura musulmana, famoso por su universidad y su mercado de libros. Atraídos por su riqueza, los ejércitos de al-Mansur de Marruecos destruyeron la capital de Songhai, Gao, en 1591. Tras la caída de Songhai, varios reinos pequeños -Macina, Gonja, Ségou, Kaarta- intentaron dominar el oeste del Sudán, pero las luchas continuas y el declive económico fueron los únicos resultados.
Los reinos de Hausa y Kanem-Bornu
Al este de Songhai, entre el río Níger y el lago Chad, surgieron las ciudades-estado de Hausa y el imperio de Kanem-Bornu. Los reinos hausa (Biram, Daura, Katsina, Zaria, Kano, Rano y Gobir) nacieron antes del siglo X. Después de la desaparición de Songhai, el comercio transahariano se trasladó al este, donde cayó bajo el control de Katsina y Kano. Éstos se convirtieron en los centros de un floreciente comercio y vida urbana. Al parecer, el islam fue introducido en los reinos hausa en el siglo XIV desde Kanem-Bornu.
Este último imperio existía en el siglo VIII como un impreciso reino intermedio al norte y al este del lago Chad. En un principio fue gobernado por un pueblo nómada, los zaghawa, pero fueron reemplazados por una nueva dinastía, los saifawa, que reinó desde el año 800 hasta el año 1846 aproximadamente. Los nuevos soberanos se convirtieron al islam en el siglo XI. A finales del siglo XIV se trasladaron a la región de Bornu, y la zona anterior, Kanem, fue conquistada por el pueblo bulala procedente del sur. El soberano bornu más conocido fue Mai Idris Alooma (reinó entre 1580-1617 aproximadamente), que introdujo armas de fuego compradas a los turcos otomanos. En su momento de esplendor, Kanem-Bornu controló las rutas saharianas hacia Egipto, pero a mitad del siglo XVII ya había comenzado su decadencia.
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espero que te ayude
Explicación:
África es un continente muy cercano a nosotros, pero mucho más extenso y muy diferente. De hecho, tiene más de 30 millones de kilómetros cuadrados divididos en 54 países y un total de mil millones de habitantes, unas cifras muy superiores a las que nos encontramos en los países occidentales.
Viajar es un placer, pero para disfrutar al máximo es importante planificar y conocer los riesgos. Algunos países han vivido situaciones convulsas en los últimos tiempos, por eso es importante que estés bien informado/a. Hemos preparado una guía gratuita con algunos consejos para viajar y con información detallada de la situación actual de algunos países como: Angola, Eritrea, Etiopia, Tanzania, Zambia y muchos más
Respuesta:
Reinos de África occidental
En África occidental surgieron una serie de reinos de raza negra cuya base económica yacía en el control de las rutas comerciales transaharianas. Se enviaban al norte oro, nueces de kola y esclavos a cambio de ropas, utensilios y sal.
Ghana
El primero de estos reinos, Ghana, comenzó a existir el siglo V en lo que hoy es el sureste de Mauritania; su capital, Kumbi Saleh, ha sido excavada en tiempos modernos. Ya en el siglo XI, los ejércitos de Ghana, equipados con armas de hierro, se adueñaron de las rutas de comercio que se extienden desde el actual Marruecos a los bosques costeros de África occidental al sur.
Los bereberes nómadas de la confederación sanhaja (la actual Mauritania central) formaban el nexo principal entre Ghana y el norte. Una vez que los árabes consiguieron controlar las costas del noroeste, comenzaron a explotar estas rutas comerciales. A principios del siglo XI había consejeros musulmanes en la corte de Ghana, y los mercaderes musulmanes vivían en grandes barrios de extranjeros desde los que dirigían un comercio a gran escala muy lucrativo.
En el siglo XI, Ghana fue destruida por los almorávides, una belicosa facción musulmana fundada entre los bereberes sanhaja. A principios del siglo XI se alzaron en guerra santa (yihad) y controlaron las rutas de caravanas del Sahara. Entonces el movimiento se separó; un grupo avanzó hacia el norte para conquistar Marruecos y España, mientras que el otro se dirigió al sur para destruir (en el año 1076) la capital de Ghana. Durante el siglo siguiente el pueblo Soso de Futa Yallon, anteriormente vasallos de Ghana, tomó el control del área, pero fueron conquistados a su vez por los pueblos de Mali en el año 1240 aproximadamente.
Mali y Songhai
En el centro de las cuencas altas de los ríos Senegal y Níger, Mali evolucionó a principios del siglo XI a partir de un grupo de las tribus mande. A mediados del siglo XIII, el reino comenzó un periodo de expansión bajo el vigoroso monarca Sundiata. Se supone que poco después los gobernantes de Mali se convirtieron al islam. El imperio Mali alcanzó su punto culminante bajo el mansa (rey) Musa, que condujo una peregrinación a La Meca en 1324-1325, inició relaciones diplomáticas con Túnez y Egipto, y llevó a varios eruditos y sabios musulmanes a su imperio; a partir de la época de Mansa Musa, Mali apareció en los mapas de Europa.
Después de 1400, el imperio decayó y Songhai se convirtió en el reino más importante del Sudán occidental. Aunque Songhai data de antes del siglo IX, su gran periodo de expansión se produjo con el reinado de Sunni Ali y Askia Muhammad. Durante el reinado de este último el islam prosperó en la corte, y Tombuctu se convirtió en el mayor centro de la cultura musulmana, famoso por su universidad y su mercado de libros. Atraídos por su riqueza, los ejércitos de al-Mansur de Marruecos destruyeron la capital de Songhai, Gao, en 1591. Tras la caída de Songhai, varios reinos pequeños -Macina, Gonja, Ségou, Kaarta- intentaron dominar el oeste del Sudán, pero las luchas continuas y el declive económico fueron los únicos resultados.
Los reinos de Hausa y Kanem-Bornu
Al este de Songhai, entre el río Níger y el lago Chad, surgieron las ciudades-estado de Hausa y el imperio de Kanem-Bornu. Los reinos hausa (Biram, Daura, Katsina, Zaria, Kano, Rano y Gobir) nacieron antes del siglo X. Después de la desaparición de Songhai, el comercio transahariano se trasladó al este, donde cayó bajo el control de Katsina y Kano. Éstos se convirtieron en los centros de un floreciente comercio y vida urbana. Al parecer, el islam fue introducido en los reinos hausa en el siglo XIV desde Kanem-Bornu.
Este último imperio existía en el siglo VIII como un impreciso reino intermedio al norte y al este del lago Chad. En un principio fue gobernado por un pueblo nómada, los zaghawa, pero fueron reemplazados por una nueva dinastía, los saifawa, que reinó desde el año 800 hasta el año 1846 aproximadamente. Los nuevos soberanos se convirtieron al islam en el siglo XI. A finales del siglo XIV se trasladaron a la región de Bornu, y la zona anterior, Kanem, fue conquistada por el pueblo bulala procedente del sur. El soberano bornu más conocido fue Mai Idris Alooma (reinó entre 1580-1617 aproximadamente), que introdujo armas de fuego compradas a los turcos otomanos. En su momento de esplendor, Kanem-Bornu controló las rutas saharianas hacia Egipto, pero a mitad del siglo XVII ya había comenzado su decadencia.