Identificar las causas de las diferentes alteraciones en las plantas.
Conocer conceptos de los principales grupos de plagas, enfermedades, malas hierbas y alteraciones fisiológicas.
Saber cuantificar los daños causados y establecer estrategias de control que supongan minimizar los tratamientos fitosanitarios.
1.2. DEFINICIÓN
Plaga agrícola es una población de animales fitófagos (se alimentan de plantas) que disminuye la producción del cultivo, reduce el valor de la cosecha o incrementa sus costos de producción. Se trata de un criterio esencialmente económico.
Por lo tanto, si nos basamos en este criterio económico, deberemos ampliar el concepto de plaga e introducir también el de enfermedad y especies invasoras (malas hierbas) porque al igual que las plagas de animales o insectos causan una reducción de la cosecha ya sea en cantidad o en calidad o bien por competencia directa con el cultivar.
Así que a continuación ampliaremos la definición anterior y podemos decir que se consideran plagas a todos aquellos seres vivos que compiten con el hombre en la búsqueda de agua y alimentos, invadiendo los espacios en los que se desarrollan las actividades humanas.
Su presencia resulta molesta, desagradable y anti-económica, pudiendo dañar estructuras o bienes, y constituyen uno de los más importantes diseminadores de enfermedades en el alimento.
Una vez dejado claro el concepto de plaga, pasaremos a clasificarlas.
1.3. CLASIFICACIÓN Y DAÑOS
De entre las diferentes clasificaciones que se pueden realizar de estas plagas destacamos:
A) Biológica:
1.3.1. Vertebrados: mamíferos, aves y reptiles
1.3.2. Invertebrados: insectos, ácaros y nematodos.
1.3.3. Organismos patógenos: virus, bacterias y hongos
1.3.4. Plantas adventicias (malas hierbas).
B) Por el tipo de daño que causan:
Plaga directa: Cuando la especie daña directamente a los órganos de la planta que el hombre va a cosechar.
Plaga indirecta: Cuando la especie daña órganos de la planta que no son las partes que el hombre cosecha, pero influyen de manera directa sobre ellos
Debido al contexto del curso, nos centraremos en la clasificación biológica que pasamos a desarrollar a continuación.
1.3.3.11.3.2.21.3.1. Vertebrados: mamíferos, aves y reptiles.
En este apartado podemos destacar el daño que pueden generar pequeños y grandes roedores así como ciertas aves. Los roedores pueden ser los topillos en el cereal y algunas hortícolas y el conejo y ciertas aves en plantaciones de frutales jóvenes y viejas tanto por la destrucción del propio fruto y posible entrada futura de una enfermedad, como por la destrucción de tejido vegetal.
1.3.2. Invertebrados: insectos, ácaros y nematodos.
1.3.2.1. Insectos
Son animales invertebrados, sin esqueleto ni columna vertebral, pertenecientes al grupo de los artrópodos (patas articuladas).
Los insectos poseen un gran poder de multiplicación, aunque existen una serie de factores limitantes como las condiciones climáticas, parásitos y predadores. Por tanto, la incidencia de una determinada plaga variará de una zona a otra según las condiciones a la que está sometida en un momento determinado. Por lo cual, los ataques de dichos insectos son característicos de determinados periodos del año, pudiendo pasar por fases de reposo si las condiciones no le son favorables.
Respuesta:
1.1. OBJETIVOS
Identificar las causas de las diferentes alteraciones en las plantas.
Conocer conceptos de los principales grupos de plagas, enfermedades, malas hierbas y alteraciones fisiológicas.
Saber cuantificar los daños causados y establecer estrategias de control que supongan minimizar los tratamientos fitosanitarios.
1.2. DEFINICIÓN
Plaga agrícola es una población de animales fitófagos (se alimentan de plantas) que disminuye la producción del cultivo, reduce el valor de la cosecha o incrementa sus costos de producción. Se trata de un criterio esencialmente económico.
Por lo tanto, si nos basamos en este criterio económico, deberemos ampliar el concepto de plaga e introducir también el de enfermedad y especies invasoras (malas hierbas) porque al igual que las plagas de animales o insectos causan una reducción de la cosecha ya sea en cantidad o en calidad o bien por competencia directa con el cultivar.
Así que a continuación ampliaremos la definición anterior y podemos decir que se consideran plagas a todos aquellos seres vivos que compiten con el hombre en la búsqueda de agua y alimentos, invadiendo los espacios en los que se desarrollan las actividades humanas.
Su presencia resulta molesta, desagradable y anti-económica, pudiendo dañar estructuras o bienes, y constituyen uno de los más importantes diseminadores de enfermedades en el alimento.
Una vez dejado claro el concepto de plaga, pasaremos a clasificarlas.
1.3. CLASIFICACIÓN Y DAÑOS
De entre las diferentes clasificaciones que se pueden realizar de estas plagas destacamos:
A) Biológica:
1.3.1. Vertebrados: mamíferos, aves y reptiles
1.3.2. Invertebrados: insectos, ácaros y nematodos.
1.3.3. Organismos patógenos: virus, bacterias y hongos
1.3.4. Plantas adventicias (malas hierbas).
B) Por el tipo de daño que causan:
Plaga directa: Cuando la especie daña directamente a los órganos de la planta que el hombre va a cosechar.
Plaga indirecta: Cuando la especie daña órganos de la planta que no son las partes que el hombre cosecha, pero influyen de manera directa sobre ellos
Debido al contexto del curso, nos centraremos en la clasificación biológica que pasamos a desarrollar a continuación.
1.3.3.11.3.2.21.3.1. Vertebrados: mamíferos, aves y reptiles.
En este apartado podemos destacar el daño que pueden generar pequeños y grandes roedores así como ciertas aves. Los roedores pueden ser los topillos en el cereal y algunas hortícolas y el conejo y ciertas aves en plantaciones de frutales jóvenes y viejas tanto por la destrucción del propio fruto y posible entrada futura de una enfermedad, como por la destrucción de tejido vegetal.
1.3.2. Invertebrados: insectos, ácaros y nematodos.
1.3.2.1. Insectos
Son animales invertebrados, sin esqueleto ni columna vertebral, pertenecientes al grupo de los artrópodos (patas articuladas).
Los insectos poseen un gran poder de multiplicación, aunque existen una serie de factores limitantes como las condiciones climáticas, parásitos y predadores. Por tanto, la incidencia de una determinada plaga variará de una zona a otra según las condiciones a la que está sometida en un momento determinado. Por lo cual, los ataques de dichos insectos son característicos de determinados periodos del año, pudiendo pasar por fases de reposo si las condiciones no le son favorables.