Respuesta:Siguiendo el análisis de Sergio Guerra Vilaboy, el ciclo independentista
que se desarrolló durante el siglo XIX en los países ahora llamados
“latinoamericanos” puede ser dividido en tres etapas: la primera tuvo
lugar entre 1790 y 1804, y en ella se consolidó la Revolución Haitiana;
la segunda se desarrolló entre 1808 y 1815, dio lugar a la formación de
juntas de gobierno autónomas en las principales ciudades de Hispanoamérica y llegó a su fin con la exitosa contraofensiva realista desatada
entre 1814 y 1815; la tercera y última tuvo su inicio en 1816 y significó
la emancipación de la América continental antes española, con las campañas libertadoras de Simón Bolívar y José de San Martín, así como la
sui generis independencia de Brasil (Guerra Vilaboy, 2003).
En líneas generales, podemos afirmar que los procesos de emancipación desarrollados en Hispanoamérica entre 1790 y 1824 no tuvieron en su inicio el objetivo de romper con el orden colonial, sino
que comenzaron como un movimiento autonomista y de fidelidad a
Fernando VII, en el que se buscaba cierta autonomía respecto de la metrópoli y la posibilidad del libre comercio con otras potencias europeas
Respuesta:Siguiendo el análisis de Sergio Guerra Vilaboy, el ciclo independentista
que se desarrolló durante el siglo XIX en los países ahora llamados
“latinoamericanos” puede ser dividido en tres etapas: la primera tuvo
lugar entre 1790 y 1804, y en ella se consolidó la Revolución Haitiana;
la segunda se desarrolló entre 1808 y 1815, dio lugar a la formación de
juntas de gobierno autónomas en las principales ciudades de Hispanoamérica y llegó a su fin con la exitosa contraofensiva realista desatada
entre 1814 y 1815; la tercera y última tuvo su inicio en 1816 y significó
la emancipación de la América continental antes española, con las campañas libertadoras de Simón Bolívar y José de San Martín, así como la
sui generis independencia de Brasil (Guerra Vilaboy, 2003).
En líneas generales, podemos afirmar que los procesos de emancipación desarrollados en Hispanoamérica entre 1790 y 1824 no tuvieron en su inicio el objetivo de romper con el orden colonial, sino
que comenzaron como un movimiento autonomista y de fidelidad a
Fernando VII, en el que se buscaba cierta autonomía respecto de la metrópoli y la posibilidad del libre comercio con otras potencias europeas
o Estados Unidos
Explicación: