TONY MELENDEZ Es un hombre nicaragüense, por culpa de una medicina que consumió su madre durante el embarazo llamada talydomina por esto el nació sin sus extremidades superiores, cuando pequeño todos los niños y jóvenes lo molestaban por su incapacidad; pero él fue creciendo al lado y con el apoyo de sus padres, cuando Tony veía a su papá tocar la guitarra y sintió el gran deseo de poderla tocar también, hasta que un día su papá puso la guitarra en el suelo. "Tony", dijo, "anda a lavar los pies". Se los lavó y se sentó a tocar la guitarra por primera vez. Nunca dejó que su condición física le desanimara, y con mucho esfuerzo y práctica, aprendió a tocarla magistralmente con los dedos de sus pies; por esto un día fue elegido para cantar delante de su Santidad Juan Pablo II, quien lo felicito por tener la capacidad de tocar guitarra y dar ejemplo de vida a la humanidad, a partir de estos momentos el es una persona muy admirada por superarse y dar una voz de esperanza a todos aquellos que se sienten diseccionados de su vida
TONY MELENDEZ Es un hombre nicaragüense, por culpa de una medicina que consumió su madre durante el embarazo llamada talydomina por esto el nació sin sus extremidades superiores, cuando pequeño todos los niños y jóvenes lo molestaban por su incapacidad; pero él fue creciendo al lado y con el apoyo de sus padres, cuando Tony veía a su papá tocar la guitarra y sintió el gran deseo de poderla tocar también, hasta que un día su papá puso la guitarra en el suelo. "Tony", dijo, "anda a lavar los pies". Se los lavó y se sentó a tocar la guitarra por primera vez. Nunca dejó que su condición física le desanimara, y con mucho esfuerzo y práctica, aprendió a tocarla magistralmente con los dedos de sus pies; por esto un día fue elegido para cantar delante de su Santidad Juan Pablo II, quien lo felicito por tener la capacidad de tocar guitarra y dar ejemplo de vida a la humanidad, a partir de estos momentos el es una persona muy admirada por superarse y dar una voz de esperanza a todos aquellos que se sienten diseccionados de su vida