Cuentan que un alpinista, desesperado por conquistar el Aconcagua, inició su travesía, después de años de preparación. Subiendo por un acantilado a sólo cien metros de la cima, resbaló y se desplomó por los aires. Caía a gran velocidad, sólo podía ver veloces manchas más oscuras que pasaban en la misma oscuridad, y la terrible sensación de ser succionado por la gravedad. Seguía cayendo… y en esos angustiantes momentos, le pasaron por su mente todos los gratos y no tan gratos momentos de su vida. Pensaba que iba a morir; sin embargo, de repente, sintió un tirón muy fuerte que casi lo partió en dos… Sí, como todo un alpinista experimentado, había clavado estacas de seguridad con candados a una larguísima soga que lo
Después de un momento de quietud, suspendido por los aires, gritó con todas sus fuerzas:
– ¡Ayúdame Dios mío!… De repente, una voz grave y profunda de los cielos le contestó: – ¿Qué quieres que haga, hijo mío? – Sálvame, Dios mío. – ¿Realmente crees que te puedo salvar? – Por supuesto, Señor. – Entonces, corta la cuerda que te sostiene… Hubo un momento de silencio y quietud. El hombre se aferró más a la cuerda y reflexionó… Cuenta el equipo de rescate que al día siguiente encontraron colgado a un alpinista muerto, congelado, agarrado fuertemente con las manos a una cuerda… a tan solo un metro del suelo.
Reflexiona a partir de la historia: (mínimo 2 páginas)
• ¿Cuál crees es la enseñanza de la historia? (5 renglones) • ¿Qué te llama la atención de la historia para tu vida? (5 renglones) • ¿Crees que estamos aferrados a cosas que nos impiden ver o sentir a Dios? • ¿Crees que necesitamos de Dios en estos momentos?; ¿Cómo? (5 renglones) Elabora un dibujo o un grafiti relacionado con el cuento anterior (ojo…no puede ser el mismo de la guía)
Respuesta: ok
Explicación: ok