anglik0408
Los símbolos de la Confirmación son fundamentalmente la "crismación" y la "imposición de manos". La crismación es la unción en la frente con crisma, que es un aceite aromático, símbolo de la unción invisible del Espíritu Santo. La unción está relacionada con el cuerno de la abundancia, es la plenitud de la comunicación y los dones con el Espíritu. Se enriquece el aroma del ungüento indicando el bueno olor de Cristo. Esta unción era realizada a favor de los reyes o sacerdotes, que eran ungidos por la divinidad. Era el reconocimiento de una autoridad para los hombres. Ahora en la Confirmación la unción es la plenitud de la fuerza del Espíritu Santo, que comunica sus siete dones en la persona confirmada. el simbolismo viene acompañado por la palabra, se llama por el nombre y se indica: "Fulanito, recibe por esta señal el don del Espíritu Santo". A la vez que se crisma al confirmando se hace la señal de la cruz en la frente. Esta marca es indeleble, sólo se recibe una vez, al igual que sucedía con el sacramento del Bautismo. Esa marca configura al confirmado en el misterio de la muerte de Cristo, y lo hace de una vez para siempre.
El segundo gesto de la Confirmación es la imposición de manos. Hoy no se le da tanta importancia, pero sigue siendo muy apreciado por la comunidad eclesial. La imposición de manos de la Confirmación se hace con la invitación al Espíritu Santo para que infunda su don con el envío del Paráclito. Este gesto tiene que ver con el gesto de bendición, es la comunicación de una gracia o una fuerza.
Este gesto incluso llegó a confundirse con la bendición sobre una persona. La imposición de manos era un gesto Judío, suponía la trasmisión de un poder, de una fuerza o de una herencia suficiente, normalmente con la finalidad de llevar a cabo una misión. Supone como gesto la "traditio", la trasmisión de algo valioso, implica una nueva posesión de algo importante. En el caso del sacramento que nos ocupa, la imposición de manos es una entrega de la gracia del Espíritu Santo. Simbolizada habitualmente por el fuego y el viento, puesto que fueron las teofanías de Pentecostés. El fuego es purificador, pero es también fuerte, hermoso, luminoso y robusto. El viento, como signo del Espíritu, es un símbolo más antiguo, dado que lo encontramos en el AT, donde la palabra "ruah" significa precisamente "viento" o "espíritu". El viento es suave y fuerte a la vez, es imposible de detener. La Confirmación es eso, un viento impetuoso, un fuego que abrasa, es el don del Espíritu para la comunidad.
El segundo gesto de la Confirmación es la imposición de manos. Hoy no se le da tanta importancia, pero sigue siendo muy apreciado por la comunidad eclesial. La imposición de manos de la Confirmación se hace con la invitación al Espíritu Santo para que infunda su don con el envío del Paráclito. Este gesto tiene que ver con el gesto de bendición, es la comunicación de una gracia o una fuerza.
Este gesto incluso llegó a confundirse con la bendición sobre una persona. La imposición de manos era un gesto Judío, suponía la trasmisión de un poder, de una fuerza o de una herencia suficiente, normalmente con la finalidad de llevar a cabo una misión. Supone como gesto la "traditio", la trasmisión de algo valioso, implica una nueva posesión de algo importante. En el caso del sacramento que nos ocupa, la imposición de manos es una entrega de la gracia del Espíritu Santo. Simbolizada habitualmente por el fuego y el viento, puesto que fueron las teofanías de Pentecostés. El fuego es purificador, pero es también fuerte, hermoso, luminoso y robusto. El viento, como signo del Espíritu, es un símbolo más antiguo, dado que lo encontramos en el AT, donde la palabra "ruah" significa precisamente "viento" o "espíritu". El viento es suave y fuerte a la vez, es imposible de detener. La Confirmación es eso, un viento impetuoso, un fuego que abrasa, es el don del Espíritu para la comunidad.
éxitos :)