Todos hemos sufrido escasez de dinero en algún momento. Es una experiencia individual. No es lo mismo que el problema social de la pobreza. Puesto que el dinero es la medida de la riqueza, su falta puede ser la medida de la falta de riqueza, pero no es un problema social. Ver «Principios». La pobreza, como problema social, es una herida profunda que contagia cada dimensión de la cultura y de la sociedad. Incluye un bajo nivel sostenido de los ingresos de los miembros de una comunidad. Incluye la privación de acceso a servicios como educación, mercados, sanidad o posibilidad de tomar decisiones, y también la falta de prestaciones comunitarias como agua, alcantarillado, carreteras, transporte y comunicaciones.
Además, es la «pobreza de espíritu» lo que induce a los miembros de esa comunidad a compartir y creer en su propia impotencia, desesperanza, apatía y timidez. La pobreza, y especialmente los factores que contribuyen a su existencia, es un problema social, y su solución también es social. En estas páginas web de adiestramiento, aprendemos que no podemos luchar contra la pobreza aliviando sus síntomas, sino únicamente atacando los factores que la producen. Este folleto describe los «cinco grandes» factores que contribuyen al problema social de la pobreza.
Una simple transferencia de fondos, incluso si es para las víctimas de la pobreza, ni la erradicará ni la reducirá. Solamente aliviará los síntomas de pobreza a corto plazo. No es una solución duradera. La pobreza, puesto que es un problema social, pide una solución social. Esta solución es la supresión clara, consciente y deliberada de los cinco factores más importantes de la pobreza.
Factores, causas e historia:
Un «factor» y una «causa» no son exactamente lo mismo. Una «causa» puede ser algo que contribuye al origen de un problema, como la pobreza, mientras que un «factor» puede ser algo que contribuye a su perpetuación cuando ya existe.
La pobreza a escala mundial tiene muchas causas históricas: el colonialismo, la esclavitud, la guerra y las invasiones. Existe una gran diferencia entre estas causas y lo que llamamos los factores que mantienen las condiciones de pobreza. La diferencia reside en lo que podemos hacer hoy con respecto a ellos. No podemos volver atrás en la historia y cambiar el pasado. La pobreza existe. La pobreza tuvo sus causas. Sobre lo que potencialmente podemos actuar es sobre los factores que la perpetúan.
Es de sobras conocido que muchas naciones de Europa, enfrentadas a guerras devastadoras, como la primera o la segunda guerra mundial, se vieron reducidas a la pobreza, y su gente se vio obligada a vivir dependiendo de limosnas y caridad, escasamente sobreviviendo. En unas décadas, estos países han florecido en cuanto a renta doméstica real, y se han convertido en países desarrollados e influyentes, de prósperos habitantes. También sabemos que muchas otras naciones han continuado entre las menos desarrolladas del planeta, aunque se hayan gastado en ellas billones de dólares de supuesta «ayuda». ¿Por qué? Porque no se atacaron los factores de pobreza, sino sólo los síntomas. En un contexto macroeconómico nacional, un PIB (producto interior bruto) bajo no es pobreza en sí, es un síntoma de pobreza, como problema social.
La pobreza como problema social:
Todos hemos sufrido escasez de dinero en algún momento. Es una experiencia individual. No es lo mismo que el problema social de la pobreza. Puesto que el dinero es la medida de la riqueza, su falta puede ser la medida de la falta de riqueza, pero no es un problema social. Ver «Principios». La pobreza, como problema social, es una herida profunda que contagia cada dimensión de la cultura y de la sociedad. Incluye un bajo nivel sostenido de los ingresos de los miembros de una comunidad. Incluye la privación de acceso a servicios como educación, mercados, sanidad o posibilidad de tomar decisiones, y también la falta de prestaciones comunitarias como agua, alcantarillado, carreteras, transporte y comunicaciones.
Además, es la «pobreza de espíritu» lo que induce a los miembros de esa comunidad a compartir y creer en su propia impotencia, desesperanza, apatía y timidez. La pobreza, y especialmente los factores que contribuyen a su existencia, es un problema social, y su solución también es social. En estas páginas web de adiestramiento, aprendemos que no podemos luchar contra la pobreza aliviando sus síntomas, sino únicamente atacando los factores que la producen. Este folleto describe los «cinco grandes» factores que contribuyen al problema social de la pobreza.
Una simple transferencia de fondos, incluso si es para las víctimas de la pobreza, ni la erradicará ni la reducirá. Solamente aliviará los síntomas de pobreza a corto plazo. No es una solución duradera. La pobreza, puesto que es un problema social, pide una solución social. Esta solución es la supresión clara, consciente y deliberada de los cinco factores más importantes de la pobreza.
Factores, causas e historia:
Un «factor» y una «causa» no son exactamente lo mismo. Una «causa» puede ser algo que contribuye al origen de un problema, como la pobreza, mientras que un «factor» puede ser algo que contribuye a su perpetuación cuando ya existe.
La pobreza a escala mundial tiene muchas causas históricas: el colonialismo, la esclavitud, la guerra y las invasiones. Existe una gran diferencia entre estas causas y lo que llamamos los factores que mantienen las condiciones de pobreza. La diferencia reside en lo que podemos hacer hoy con respecto a ellos. No podemos volver atrás en la historia y cambiar el pasado. La pobreza existe. La pobreza tuvo sus causas. Sobre lo que potencialmente podemos actuar es sobre los factores que la perpetúan.
Es de sobras conocido que muchas naciones de Europa, enfrentadas a guerras devastadoras, como la primera o la segunda guerra mundial, se vieron reducidas a la pobreza, y su gente se vio obligada a vivir dependiendo de limosnas y caridad, escasamente sobreviviendo. En unas décadas, estos países han florecido en cuanto a renta doméstica real, y se han convertido en países desarrollados e influyentes, de prósperos habitantes. También sabemos que muchas otras naciones han continuado entre las menos desarrolladas del planeta, aunque se hayan gastado en ellas billones de dólares de supuesta «ayuda». ¿Por qué? Porque no se atacaron los factores de pobreza, sino sólo los síntomas. En un contexto macroeconómico nacional, un PIB (producto interior bruto) bajo no es pobreza en sí, es un síntoma de pobreza, como problema social.
Trabajo
y Salud, son primordiales.