luisfelipediez
Eran las que disponian que los distintos reyes debian ayudarse mutuamente , no atacarse , ni tomar decisiones a favor de la guerra y cada 5 o 6 años se reunian todos los reyes para juzgar y sancionar a los que no cumplian con las leyes.
En dichos diálogos, la isla aparece como una potencia militar que existió nueve mil años antes de la época del legislador ateniense Solón, quien es la fuente del relato. Esta isla estaba ubicada más allá de las Columnas de Hércules;2 y es descrita como más grande que Libia y Asia juntas.2
El poderío de la Atlántida fue tal que llegó a dominar el occidente de Europa y el norte del África, hasta ser detenida por la ciudad de Atenas. En ese mismo momento una catástrofe, que no se describe, hizo desaparecer a la vez la isla y los ejércitos rivales, «en un solo día y una noche terrible».3 El mar donde estuviera la Atlántida se tornó innavegable a causa de los bajíos, en tanto que Atenas y los pueblos de Grecia olvidaron el suceso, pues sólo unos pocos sobrevivieron. En Egipto, en cambio, se preservó el recuerdo que, miles de años más tarde, llegó a conocimiento de Solón y, a partir de sus relatos y un manuscrito, a Critias, el narrador.
La descripción detallada de la isla y la mención de que se trata de una historia verdadera llevó a muchos investigadores a proponer diversas conjeturas sobre su ubicación y existencia. Del mismo modo, el hecho de que la fuente sea una tradición no comprobada y la evidencia de que en los diálogos se hace uso de la ironía hizo que otros estudios considerasen a la historia como una invención literaria destinada a expresar ciertas ideas políticas de Platón.
Durante la Antigüedad y la Edad Media prevaleció la interpretación del relato como una alegoría, pero a partir de la época Moderna y, especialmente desde de la segunda mitad del siglo XIX, durante el Romanticismo, se multiplicaron las teorías sobre la Atlántida, identificándola con diversas culturas del pasado o con la cuna de la civilización.
La moderna investigación, no obstante, ha comprobado que no existen las supuestas fuentes egipcias del relato y que la narración presenta anacronismos y datos imposibles, lo cual lleva a descartarla como histórica. Algunos investigadores, sin embargo, admiten la posibilidad de que el mito haya sido inspirado en un fondo de realidad histórica vinculado a algún desastre natural.
En dichos diálogos, la isla aparece como una potencia militar que existió nueve mil años antes de la época del legislador ateniense Solón, quien es la fuente del relato. Esta isla estaba ubicada más allá de las Columnas de Hércules;2 y es descrita como más grande que Libia y Asia juntas.2
El poderío de la Atlántida fue tal que llegó a dominar el occidente de Europa y el norte del África, hasta ser detenida por la ciudad de Atenas. En ese mismo momento una catástrofe, que no se describe, hizo desaparecer a la vez la isla y los ejércitos rivales, «en un solo día y una noche terrible».3 El mar donde estuviera la Atlántida se tornó innavegable a causa de los bajíos, en tanto que Atenas y los pueblos de Grecia olvidaron el suceso, pues sólo unos pocos sobrevivieron. En Egipto, en cambio, se preservó el recuerdo que, miles de años más tarde, llegó a conocimiento de Solón y, a partir de sus relatos y un manuscrito, a Critias, el narrador.
La descripción detallada de la isla y la mención de que se trata de una historia verdadera llevó a muchos investigadores a proponer diversas conjeturas sobre su ubicación y existencia. Del mismo modo, el hecho de que la fuente sea una tradición no comprobada y la evidencia de que en los diálogos se hace uso de la ironía hizo que otros estudios considerasen a la historia como una invención literaria destinada a expresar ciertas ideas políticas de Platón.
Durante la Antigüedad y la Edad Media prevaleció la interpretación del relato como una alegoría, pero a partir de la época Moderna y, especialmente desde de la segunda mitad del siglo XIX, durante el Romanticismo, se multiplicaron las teorías sobre la Atlántida, identificándola con diversas culturas del pasado o con la cuna de la civilización.
La moderna investigación, no obstante, ha comprobado que no existen las supuestas fuentes egipcias del relato y que la narración presenta anacronismos y datos imposibles, lo cual lleva a descartarla como histórica. Algunos investigadores, sin embargo, admiten la posibilidad de que el mito haya sido inspirado en un fondo de realidad histórica vinculado a algún desastre natural.