Los actores protagonistas de todo golpe de Estado suelen ser funcionarios pertenecientes a la administración estatal, principalmente las fuerzas armadas y la policía, o también pueden ser otros funcionarios públicos o de la élite política en general.
El desarrollo se caracteriza por la amenaza o utilización de la violencia, por la sorpresa de la acción, por estar precedido de una fase conspirativa y por la ruptura manifiesta de la legalidad y de la legitimidad del régimen asaltado. Además, se debe tomar en cuenta que todo golpe de Estado se enfrenta no sólo a la respuesta que provoque en el propio Estado sino también a la que tenga lugar en la sociedad en que se desarrolla, de tal forma que puede fracasar al encontrar una resistencia popular mal calculada.
Los actores protagonistas de todo golpe de Estado suelen ser funcionarios pertenecientes a la administración estatal, principalmente las fuerzas armadas y la policía, o también pueden ser otros funcionarios públicos o de la élite política en general.
El desarrollo se caracteriza por la amenaza o utilización de la violencia, por la sorpresa de la acción, por estar precedido de una fase conspirativa y por la ruptura manifiesta de la legalidad y de la legitimidad del régimen asaltado. Además, se debe tomar en cuenta que todo golpe de Estado se enfrenta no sólo a la respuesta que provoque en el propio Estado sino también a la que tenga lugar en la sociedad en que se desarrolla, de tal forma que puede fracasar al encontrar una resistencia popular mal calculada.