El deterioro de los cartílagos favorece el roce y desgaste entre las superficies óseas, que pueden inflamarse y comenzar a doler (artritis). En esta enfermedad del aparato locomotor, el desgaste deforma las articulaciones, cuya movilidad se limita y se vuelven inestables.
Respuesta:
El deterioro de los cartílagos favorece el roce y desgaste entre las superficies óseas, que pueden inflamarse y comenzar a doler (artritis). En esta enfermedad del aparato locomotor, el desgaste deforma las articulaciones, cuya movilidad se limita y se vuelven inestables.