El 28 de junio de 1919, a las afueras de París, los dignatarios europeos se congregaron en el Palacio de Versalles para firmar uno de los tratados más odiados de la historia. El Tratado de Versalles puso fin formalmente a la Primera Guerra Mundial y, al mismo tiempo, sentó las bases de la Segunda Guerra Mundial. Aunque fue precedido de una conferencia de paz que duró más de un año, no gustó a ninguno de los países firmantes.
Más de 65 millones de personas habían combatido en la Primera Guerra Mundial, que se cobró la vida de más de 8,5 millones de miembros del ejército y de al menos 6,6 millones de civiles. La guerra diezmó tierras agrícolas, ciudades y campos de batalla de toda Europa. Y, según muchos, Alemania fue la culpable. A pesar de que los historiadores contemporáneos aún están divididos respecto a quién fue el responsable de la Primera Guerra Mundial, el tratado culpó y castigó a Alemania.
El 28 de junio de 1919, a las afueras de París, los dignatarios europeos se congregaron en el Palacio de Versalles para firmar uno de los tratados más odiados de la historia. El Tratado de Versalles puso fin formalmente a la Primera Guerra Mundial y, al mismo tiempo, sentó las bases de la Segunda Guerra Mundial. Aunque fue precedido de una conferencia de paz que duró más de un año, no gustó a ninguno de los países firmantes.
Más de 65 millones de personas habían combatido en la Primera Guerra Mundial, que se cobró la vida de más de 8,5 millones de miembros del ejército y de al menos 6,6 millones de civiles. La guerra diezmó tierras agrícolas, ciudades y campos de batalla de toda Europa. Y, según muchos, Alemania fue la culpable. A pesar de que los historiadores contemporáneos aún están divididos respecto a quién fue el responsable de la Primera Guerra Mundial, el tratado culpó y castigó a Alemania.