El duque de Choiseul decide aliarse con Austria con el propósito de poner fin a la prosperidad de Gran Bretaña y Rusia, por lo que pide la mano de María Antonieta de Austria, archiduquesa de Austria e hija de Francisco de Lorena y la emperatriz María Teresa, para desposarla con el delfín.19
Para el cruce de la frontera por María Antonieta se construyeron dos pabellones, simbolizando a las dos potencias aliadas. En el pabellón de Francia se encontraban la condesa de Noialles, dama de honor; la duquesa de Cossé, dama de vestuario; cuatro damas de palacio; el conde de Saulx-Tavannes, caballero de honor; el conde de Tessé, primer escudero, y el obispo de Chartres, primer capellán.20 En el otro pabellón se hallaban las damas austríacas que habían acompañado a la archiduquesa y la habían vestido con prendas francesas enviadas desde París.20
María Antonieta como delfina de Francia.
María Antonieta entró en Estrasburgo e hizo un alto en Compiègne, a donde llegó el 15 de mayo de 1770. Allí conoció al rey, a su futuro marido y a lasMesdames de Francia (las hijas de Luis XV).21Después, el séquito se dirigió a Saint-Denis, donde la carmelita Luisa de Francia (hija de Luis XV) conoció a la futura delfina.22 En Saint-Denis, la archiduquesa y su séquito se alojaron en elpalacio de la Muette y el rey y el delfín volvieron a Versalles. A la mañana siguiente (16 de mayo), la delfina llegó a Versalles y los jóvenes novios fueron conducidos a la capilla de palacio, donde el gran capellán, el cardenal de la Roche, les dio la bendición nupcial.23
Las celebraciones de la corte fueron brillantes, pero las de París las superaron, y tanto en la capital como en Versalles hubo una gran afluencia de público.24 Pero estas celebraciones serían un presagio de dolorosos hechos futuros: en una de las celebraciones en París, en laplaza de Luis XV, en la cual había una gran masa de público, se lanzaron fuegos artificiales, los cuales causaron un gran temor en el pueblo, que huyó hacia otra calle. Las imperfecciones del terreno hicieron caer a algunas personas, lo que causó la caída de muchas más, que fueron aplastadas; unas por el paso de los caballos, otras por las ruedas de los carruajes, y otras se precipitaron al río Sena.25
El matrimonio no fue consumado hasta siete años después de la boda, cuando la pareja ya había ascendido al trono. Esto se achaca a una fimosis de Luis XVI, que le impedía tener relaciones sexuales.
Sus discusiones bien fuertes e separaciones xD
El duque de Choiseul decide aliarse con Austria con el propósito de poner fin a la prosperidad de Gran Bretaña y Rusia, por lo que pide la mano de María Antonieta de Austria, archiduquesa de Austria e hija de Francisco de Lorena y la emperatriz María Teresa, para desposarla con el delfín.19
Para el cruce de la frontera por María Antonieta se construyeron dos pabellones, simbolizando a las dos potencias aliadas. En el pabellón de Francia se encontraban la condesa de Noialles, dama de honor; la duquesa de Cossé, dama de vestuario; cuatro damas de palacio; el conde de Saulx-Tavannes, caballero de honor; el conde de Tessé, primer escudero, y el obispo de Chartres, primer capellán.20 En el otro pabellón se hallaban las damas austríacas que habían acompañado a la archiduquesa y la habían vestido con prendas francesas enviadas desde París.20
María Antonieta como delfina de Francia.María Antonieta entró en Estrasburgo e hizo un alto en Compiègne, a donde llegó el 15 de mayo de 1770. Allí conoció al rey, a su futuro marido y a lasMesdames de Francia (las hijas de Luis XV).21Después, el séquito se dirigió a Saint-Denis, donde la carmelita Luisa de Francia (hija de Luis XV) conoció a la futura delfina.22 En Saint-Denis, la archiduquesa y su séquito se alojaron en elpalacio de la Muette y el rey y el delfín volvieron a Versalles. A la mañana siguiente (16 de mayo), la delfina llegó a Versalles y los jóvenes novios fueron conducidos a la capilla de palacio, donde el gran capellán, el cardenal de la Roche, les dio la bendición nupcial.23
Las celebraciones de la corte fueron brillantes, pero las de París las superaron, y tanto en la capital como en Versalles hubo una gran afluencia de público.24 Pero estas celebraciones serían un presagio de dolorosos hechos futuros: en una de las celebraciones en París, en laplaza de Luis XV, en la cual había una gran masa de público, se lanzaron fuegos artificiales, los cuales causaron un gran temor en el pueblo, que huyó hacia otra calle. Las imperfecciones del terreno hicieron caer a algunas personas, lo que causó la caída de muchas más, que fueron aplastadas; unas por el paso de los caballos, otras por las ruedas de los carruajes, y otras se precipitaron al río Sena.25
El matrimonio no fue consumado hasta siete años después de la boda, cuando la pareja ya había ascendido al trono. Esto se achaca a una fimosis de Luis XVI, que le impedía tener relaciones sexuales.