Desde comienzos del siglo XX Europa vivía una auténtica carrera armamentística, siendo más pronunciada en Alemania y en Gran Bretaña, en este último país centrada particularmente en refuerzos de su Marina.
Además, tanto en Alemania como en el la Rusia de los zares los militares obtenían cada vez más poder y se inmiscuían en las políticas del día a día.
2. Imperialismo
Desde aproximadamente la segunda mitad del siglo XIX las grandes potencias europeas emplearon grandes cantidades de recursos y tiempo para lograr el control de regiones enteras en África y Asia con el fin de controlar sus materias primas.
Esto llevó a enfrentamientos continuos entre los grandes de Europa que tenían los ojos puestos en los mismos territorios.
3. Nacionalismo
Por parte de naciones y por parte de grupos étnicos que se consideraban a sí mismo como naciones pero que que formaban parte de imperios multiétnicos. Por ejemplo, italianos, eslavos o magiares dentro del imperio austro-húngaro.
4. Política de alianzas
En los años que precedieron al estallido de la Primera Guera Mundial varios países firmaron tratados de defensa mutua. Esto quería decir que si un país era atacado, su alíado debería apoyar su defensa entrando también en guerra.
5. El asesinato del archiduque Francisco Fernando
El archiduque heredero de la corona imperial austro-húngara y su esposa fueron asesinados el 28 de junio de 1914 en la ciudad bosnia de Sarajevo –en aquel momento parte del imperio- por el nacionalista Serbio Gavrilo Princip, miembro de la organización Mano Negra.
Desde Viena, la capital austro-húngara, se acusó a Serbia de estar detrás de Mano Negra, punto muy discutido que nunca se ha podido probar. A consecuencia de ello le presentó un ultimatum para que ajusticiara a los culpables pero que de hecho suponía una pérdida de la soberanía serbia, lo que de antemano se sabía que Belgrado no podría aceptar.
El siguiente paso fue que Austria-Hungría declaró la guerra a Serbia. Y Rusia se la declaró a los austro-húngaros al salir en socorro de sus tradicionales aliados serbios, siendo ambas naciones de cultura eslava y ortodoxa.
Por su parte, Alemania, siguiendo la política de pactos y alianzas vigente en Europa declaró la guerra a Rusia. Por su parte, los alemanes atacaron Francia, aliada de los rusos y esto llevó a la entrada de Gran Bretaña en la guerra, en apoyo de los franceses pero también de los belgas, cuyo país había sido invadido por los alemanes camino de Francia. Bélgica y Gran Bretaña también tenían un tratado de defensa mutua.
La entrada en el conflicto de Gran Bretaña arrastró a la guerra a Australia, Canadá, India, Nueva Zelanda y Sudáfrica con lo que se universalizó.
Información dada por la Expera en la Historia de EE.UU, ''Adriana Collado''
1. Militarismo
Desde comienzos del siglo XX Europa vivía una auténtica carrera armamentística, siendo más pronunciada en Alemania y en Gran Bretaña, en este último país centrada particularmente en refuerzos de su Marina.
Además, tanto en Alemania como en el la Rusia de los zares los militares obtenían cada vez más poder y se inmiscuían en las políticas del día a día.
2. Imperialismo
Desde aproximadamente la segunda mitad del siglo XIX las grandes potencias europeas emplearon grandes cantidades de recursos y tiempo para lograr el control de regiones enteras en África y Asia con el fin de controlar sus materias primas.
Esto llevó a enfrentamientos continuos entre los grandes de Europa que tenían los ojos puestos en los mismos territorios.
3. Nacionalismo
Por parte de naciones y por parte de grupos étnicos que se consideraban a sí mismo como naciones pero que que formaban parte de imperios multiétnicos. Por ejemplo, italianos, eslavos o magiares dentro del imperio austro-húngaro.
4. Política de alianzas
En los años que precedieron al estallido de la Primera Guera Mundial varios países firmaron tratados de defensa mutua. Esto quería decir que si un país era atacado, su alíado debería apoyar su defensa entrando también en guerra.
5. El asesinato del archiduque Francisco Fernando
El archiduque heredero de la corona imperial austro-húngara y su esposa fueron asesinados el 28 de junio de 1914 en la ciudad bosnia de Sarajevo –en aquel momento parte del imperio- por el nacionalista Serbio Gavrilo Princip, miembro de la organización Mano Negra.
Desde Viena, la capital austro-húngara, se acusó a Serbia de estar detrás de Mano Negra, punto muy discutido que nunca se ha podido probar. A consecuencia de ello le presentó un ultimatum para que ajusticiara a los culpables pero que de hecho suponía una pérdida de la soberanía serbia, lo que de antemano se sabía que Belgrado no podría aceptar.
El siguiente paso fue que Austria-Hungría declaró la guerra a Serbia. Y Rusia se la declaró a los austro-húngaros al salir en socorro de sus tradicionales aliados serbios, siendo ambas naciones de cultura eslava y ortodoxa.
Por su parte, Alemania, siguiendo la política de pactos y alianzas vigente en Europa declaró la guerra a Rusia. Por su parte, los alemanes atacaron Francia, aliada de los rusos y esto llevó a la entrada de Gran Bretaña en la guerra, en apoyo de los franceses pero también de los belgas, cuyo país había sido invadido por los alemanes camino de Francia. Bélgica y Gran Bretaña también tenían un tratado de defensa mutua.
La entrada en el conflicto de Gran Bretaña arrastró a la guerra a Australia, Canadá, India, Nueva Zelanda y Sudáfrica con lo que se universalizó.
Información dada por la Expera en la Historia de EE.UU, ''Adriana Collado''
Buena suerte..!!