karolina2438
Reocupado por los posibles efectos de la devaluación en la estabilidad financiera, el Banco Central de Reserva ha tomado recientemente algunas medidas para desdolarizar el crédito. Con esa finalidad ha subido el encaje bancario en dólares (el porcentaje de los depósitos en esa moneda que los bancos no pueden prestar) y ha advertido que se lo subirá aún más a todos aquellos bancos que de aquí al 30 de junio no hayan reducido sus préstamos en dólares en una cierta proporción. Pero la estabilidad que así se consiga tiene un costo. Cuando se restringe la capacidad de los bancos para prestar en una moneda cualquiera, se está restringiendo también la libertad del público para escoger la moneda en la que quiere ahorrar. La dolarización del crédito va de la mano con la dolarización de los depósitos. Un gerente financiero llama al banco a pedir un préstamo y su sectorista le dice: “No tengo soles. Si quieres te presto dólares". Mientras la gente pueda escoger libremente en qué moneda ahorrar, será la diferencia entre las tasas de interés que se paga por los depósitos en soles y en dólares lo que determine qué porcentaje estará en una moneda y qué porcentaje en la otra.