Los colores de las flores se deben a las moléculas de pigmentos que se acumulan en sus pétalos -y a veces en otras partes de la flor-. Hay pigmentos de varios tipos que, combinados, dan lugar a un rango de colores muy amplio. Están, por ejemplo, los carotenoides que también son los responsables del color rojo, naranja o amarillo de muchos frutos, o los alcaloides como la betaína que da su color rojo sangre a la raíz de la remolacha.
Respuesta:
Los colores de las flores se deben a las moléculas de pigmentos que se acumulan en sus pétalos -y a veces en otras partes de la flor-. Hay pigmentos de varios tipos que, combinados, dan lugar a un rango de colores muy amplio. Están, por ejemplo, los carotenoides que también son los responsables del color rojo, naranja o amarillo de muchos frutos, o los alcaloides como la betaína que da su color rojo sangre a la raíz de la remolacha.
Explicación:
esto es