La montaña más imponente, el Everest, llega a los 8.848 metros. Si lo pensamos, aún quedan bastante más “cerca” de la altura que deben alcanzar los aviones para poder volar, que se ubica entre los 10.000 y 12.000 metros.
por dos motivos. La atmosfera, al ser más tenue en estas altitudes, hace que no se generen tantas turbulencias (se minimiza el estrés mecánico) en el avión y, además, se reduce el consumo de combustible
Explicación:
La montaña más imponente, el Everest, llega a los 8.848 metros. Si lo pensamos, aún quedan bastante más “cerca” de la altura que deben alcanzar los aviones para poder volar, que se ubica entre los 10.000 y 12.000 metros.
Respuesta:
Alrededor de 10 km
Explicación:
por dos motivos. La atmosfera, al ser más tenue en estas altitudes, hace que no se generen tantas turbulencias (se minimiza el estrés mecánico) en el avión y, además, se reduce el consumo de combustible