Queremos celebrar con la mayor solemnidad que podamos a san José, esposo de la Santísima Virgen. Nos alegramos en su fiesta al contemplar que, a un hombre sencillo, se quiso confiar Dios cuando tomó nuestra carne: el Señor confía, valora las capacidades humanas, los deseos sinceros de amar de José, de serle fiel. Por eso, en este día deseamos aprender, primero de Dios que quiso contar con sus criaturas –fiado de ellas– para llevar a cabo su plan de Redención: la empresa más grande jamás pensada. También aprendemos de José que no defraudó a Quien había depositado en él su confianza.
espero haberte ayudado :)
pon k fue la mejor respuesta :)
El hombre en quien Dios confia
Queremos celebrar con la mayor solemnidad que podamos a san José, esposo de la Santísima Virgen. Nos alegramos en su fiesta al contemplar que, a un hombre sencillo, se quiso confiar Dios cuando tomó nuestra carne: el Señor confía, valora las capacidades humanas, los deseos sinceros de amar de José, de serle fiel. Por eso, en este día deseamos aprender, primero de Dios que quiso contar con sus criaturas –fiado de ellas– para llevar a cabo su plan de Redención: la empresa más grande jamás pensada. También aprendemos de José que no defraudó a Quien había depositado en él su confianza.
Besos Ojalaa Te siiirvaa∞ω