El Partido Revolucionario Institucional es un partido político mexicano de centroderecha. En 1938 fue reconstituido como Partido de la Revolución Mexicana y en 1946 fue refundado, adoptando su nombre actual. Fue el partido gobernante en México durante setenta años consecutivos, de 1930 a 2000 En 1988 sufrió su mayor escisión, con la separación de la Corriente Democrática, que derivó en la creación del Partido de la Revolución Democrática . A lo largo de sus nueve décadas de existencia, el partido ha adoptado una amplia variedad de ideologías, a menudo determinadas por el presidente en turno. En la década de 1980, el partido fue sometido a diversas reformas que formaron su actual encarnación, con políticas identificadas como de centro-derecha, tales como la privatización de empresas estatales, relaciones estrechas con la Iglesia católica y la implementación de un capitalismo de libre mercado. En las elecciones presidenciales de 2018, fue la tercera fuerza política nacional, recibiendo el 13% de los votos emitidos, a favor de su candidato no afiliado al partido, José Antonio Meade Kuribreña. En mayo de 2019 el partido contaba con 1 159 320 militantes afiliados.
El Partido Revolucionario Institucional es un partido político mexicano de centroderecha. En 1938 fue reconstituido como Partido de la Revolución Mexicana y en 1946 fue refundado, adoptando su nombre actual. Fue el partido gobernante en México durante setenta años consecutivos, de 1930 a 2000 En 1988 sufrió su mayor escisión, con la separación de la Corriente Democrática, que derivó en la creación del Partido de la Revolución Democrática . A lo largo de sus nueve décadas de existencia, el partido ha adoptado una amplia variedad de ideologías, a menudo determinadas por el presidente en turno. En la década de 1980, el partido fue sometido a diversas reformas que formaron su actual encarnación, con políticas identificadas como de centro-derecha, tales como la privatización de empresas estatales, relaciones estrechas con la Iglesia católica y la implementación de un capitalismo de libre mercado. En las elecciones presidenciales de 2018, fue la tercera fuerza política nacional, recibiendo el 13% de los votos emitidos, a favor de su candidato no afiliado al partido, José Antonio Meade Kuribreña. En mayo de 2019 el partido contaba con 1 159 320 militantes afiliados.