La abadía de Cluny (Cluni o Clugny) situada en Francia fue fundada en la zona de lo que más tarde sería el municipio francés homónimo el 11 de septiembre del año 909 por Guillermo I de Aquitania, conde de Auvernia, el cual instaló allí al abad Bernón de Baume, y puso la abadía bajo la autoridad inmediata del papa Sergio III. La abadía y su constelación de dependencias se convirtieron pronto en el ejemplo del tipo de vida religioso del siglo XI. Entre sus abades reconocidos como santos figuran Bernón, Odón, Odilón, Hugo, Mayolo y Pedro el Venerable.
La abadía de Cluny en la actualidad.
La localidad de Cluny, situada en el departamento de Saona y Loira, en la región de Borgoña, en el centro-este de Francia, creció alrededor de la antigua abadía.
La Orden benedictina fue clave en la estabilidad conseguida por la sociedad europea del siglo XI, y, en parte debido a su estricta adhesión a un código benedictino reformado, Cluny se convirtió en el monasterio reconocido como ejemplo del estilo de vida monacal en Occidente desde finales del siglo X. Una sucesión de abades competentes fueron también figuras relevantes en el terreno internacional. El propio monasterio de Cluny se convirtió en el mayor y más prestigioso monasterio, y en la institución monástica mejor preparada de Europa. La influencia de Cluny se extendió desde la segunda mitad del siglo X hasta principios del siglo XII.
La abadía fue saqueada y destruida en su mayor parte por una turba de revolucionarios en 1790. En la actualidad solo permanece una pequeña parte del conjunto arquitectónico original.
El Hotel de Cluny de París, datado alrededor de 1334, fue antiguamente la residencia de los abades de Cluny en la ciudad. Fue convertido en museo público en 1833, y aparte de su nombre, nada lo relaciona directamente con la abadía.
En el año 2007 la abadía de Cluny fue considerada como Patrimonio europeo.[1] Actualmente, y desde finales del siglo XIX, la Gran Escuela de ingeniería Arts et Métiers ParisTech está instalada en una parte de la abadía.
Respuesta:
La abadía de Cluny (Cluni o Clugny) situada en Francia fue fundada en la zona de lo que más tarde sería el municipio francés homónimo el 11 de septiembre del año 909 por Guillermo I de Aquitania, conde de Auvernia, el cual instaló allí al abad Bernón de Baume, y puso la abadía bajo la autoridad inmediata del papa Sergio III. La abadía y su constelación de dependencias se convirtieron pronto en el ejemplo del tipo de vida religioso del siglo XI. Entre sus abades reconocidos como santos figuran Bernón, Odón, Odilón, Hugo, Mayolo y Pedro el Venerable.
La abadía de Cluny en la actualidad.
La localidad de Cluny, situada en el departamento de Saona y Loira, en la región de Borgoña, en el centro-este de Francia, creció alrededor de la antigua abadía.
La Orden benedictina fue clave en la estabilidad conseguida por la sociedad europea del siglo XI, y, en parte debido a su estricta adhesión a un código benedictino reformado, Cluny se convirtió en el monasterio reconocido como ejemplo del estilo de vida monacal en Occidente desde finales del siglo X. Una sucesión de abades competentes fueron también figuras relevantes en el terreno internacional. El propio monasterio de Cluny se convirtió en el mayor y más prestigioso monasterio, y en la institución monástica mejor preparada de Europa. La influencia de Cluny se extendió desde la segunda mitad del siglo X hasta principios del siglo XII.
La abadía fue saqueada y destruida en su mayor parte por una turba de revolucionarios en 1790. En la actualidad solo permanece una pequeña parte del conjunto arquitectónico original.
El Hotel de Cluny de París, datado alrededor de 1334, fue antiguamente la residencia de los abades de Cluny en la ciudad. Fue convertido en museo público en 1833, y aparte de su nombre, nada lo relaciona directamente con la abadía.
En el año 2007 la abadía de Cluny fue considerada como Patrimonio europeo.[1] Actualmente, y desde finales del siglo XIX, la Gran Escuela de ingeniería Arts et Métiers ParisTech está instalada en una parte de la abadía.