La cultura olmeca se considera una de las culturas madres de Mesoamérica y también siendo una de las más antiguas del Trópico.
El estilo olmeca se caracterizó por plasmarse en peñas, cuevas, esculturas grandes/chicas y objetos de barro que están repartidos por todo Mesoamérica.
Esta cultura tenía una religión politeísta, en donde sus dioses estaban relacionados con la agricultura y los elementos del sol, agua y volcanes de la región.
Es por ello que en sus esculturas se ve una mezcla de animales importantes, como el caimán, sapos, reptiles.
Se encontraban mezclados entre sí, por la cabeza y cuerpos creando sus seres mitológicos a los que llamarían dioses.
La cultura olmeca se considera una de las culturas madres de Mesoamérica y también siendo una de las más antiguas del Trópico.
El estilo olmeca se caracterizó por plasmarse en peñas, cuevas, esculturas grandes/chicas y objetos de barro que están repartidos por todo Mesoamérica.
Esta cultura tenía una religión politeísta, en donde sus dioses estaban relacionados con la agricultura y los elementos del sol, agua y volcanes de la región.
Es por ello que en sus esculturas se ve una mezcla de animales importantes, como el caimán, sapos, reptiles.
Se encontraban mezclados entre sí, por la cabeza y cuerpos creando sus seres mitológicos a los que llamarían dioses.